La justicia brasileña continuará el jueves el juicio contra el expresidente Jair Bolsonaro, que podría ser declarado inelegible por abuso de poder, después de que el primero de los siete jueces votara el martes a favor de su condenación.
El Tribunal Superior Electoral (TSE) juzga al líder ultraderechista por ataques proferidos contra el sistema de elección electrónica en Brasil durante una reunión con embajadores en julio de 2022, tres meses antes de ser derrotado en las urnas por el izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.
En la sesión del martes, el relator del caso, el juez Benedito Goncalves, fue el único en manifestarse y votó por inhabilitar políticamente por 8 años a Bolsonaro, a quien vinculó con un “discurso violento y mentiras” que puso “en jaque la credibilidad de la justicia electoral”.
Goncalves dijo que la reunión con los diplomáticos “sirvió para incitar un estado de paranoia colectiva” a través de “un conjunto de informaciones falsas o distorsionadas” sobre el sistema electoral de Brasil.
Y consideró que el expresidente hizo uso “del cargo público y del comando de las Fuerzas Armadas para estimular las tensiones institucionales”, inclusive después de su derrota electoral.
Siguiendo el parecer de la fiscalía en la primera sesión del juicio la semana pasada, Goncalves votó para que Bolsonaro sea condenado por “abuso de poder político y uso indebido de los medios de comunicación”.
Tras el voto en contra del ultraderechista, el juicio fue suspendido.
Está previsto que se reanude en una tercera sesión plenaria el jueves, cuando seguirán manifestándose los otros seis jueces.
No se descarta un aplazamiento del juicio, en caso de que alguno de los magistrados pida más tiempo para examinar el caso.
“Bolsonaro aguarda con respeto la decisión”, dijo a periodistas el abogado del exmandatario, Tarcísio Vieira, antes de ingresar a la sala del TSE el martes.
“Las pruebas son frágiles para una sanción de esa magnitud”, añadió Vieira.
Bolsonaro: “No voy a desesperarme”
En su discurso ante diplomáticos en la residencia presidencial de la Alvorada en 2022, Bolsonaro aseguró sin pruebas que buscaba “corregir fallas” del sistema de urnas electrónicas vigente con la “participación de las Fuerzas Armadas”.
El excapitán dijo que la supuesta vulnerabilidad del sistema podía servir para manipular el resultado electoral en su contra.
El líder de ultraderecha, de 68 años, niega haber cometido ningún delito a la vez que se muestra poco confiado en una absolución.
“La tendencia, lo que todo el mundo dice, es que voy a ser inelegible”, declaró Bolsonaro en una entrevista publicada este martes por el diario Folha de S. Paulo.
Pero “no voy a desesperarme”, “voy a continuar haciendo mi parte”, añadió.
En la primera sesión del jueves pasado, Vieira comparó el caso al del célebre capitán judío Alfred Dreyfus, injustamente condenado en Francia a finales del siglo XIX, pidiendo que no se cometa un “error” similar.
Recurso ante el supremo
El letrado anticipó que en caso de condena, la defensa recurrirá la sentencia ante la Corte Suprema.
Una inhabilitación política dejaría a Bolsonaro fuera de las próximas elecciones presidenciales.
“En 2026, si estoy vivo y elegible, si esa es la voluntad del pueblo, voy a disputar nuevamente la presidencia”, dijo la semana pasada Bolsonaro.
Prácticamente la mitad de los brasileños votaron por el expresidente en la segunda vuelta de las elecciones de octubre, ganadas por Lula por un estrecho margen.
La del TSE será la primera de una serie de decisiones que podrían recaer sobre el exmandatario, quien enfrenta más de una decena de procesos administrativos en el tribunal electoral.
Además es objeto de cinco investigaciones en el Supremo Tribunal Federal, con penas susceptibles de prisión, incluyendo una por su presunto papel como autor intelectual del asalto a los tres poderes por parte de seguidores suyos el 8 de enero en Brasilia.