Dos hombres fueron imputados este viernes en Francia por un caso de narcotráfico con América Latina, en el que 11 personas, incluido un funcionario de aduanas, fueron encarcelados en marzo, informaron fuentes concordantes a la AFP.
Los dos hombres, de unos 20 años y originarios de los suburbios de París, están acusados de importación organizada de drogas y asociación ilícita.
Su caso está relacionado con una supuesta red de tráfico de cocaína entre París y México, entre otros.
Durante una audiencia a la que asistió la AFP, uno de los dos imputados aseguró que “nunca” había transportado “maletas de cocaína”.
Su abogado, Seydi Ba, subrayó la intervención “episódica” de su cliente en un caso de narcotráfico cuya “dimensión internacional” ignoraba.
El hombre, sin embargo, fue puesto bajo detención provisional.
La fiscalía también pidió la detención provisional para el segundo imputado, aunque finalmente fue puesto bajo control judicial. El hombre seguía una formación de agente de pista de aeropuertos.
En marzo, la justicia francesa había ordenado la prisión preventiva para 11 de 12 sospechosos de participar en un caso de tráfico aéreo de cocaína.
Entre ellas figuraba un funcionario de aduanas que trabajaba en el aeropuerto de Roissy, al norte de París.
Según el diario Le Parisien, que reveló el caso, los narcotraficantes habrían puesto en marcha un sistema de pasajeros fantasma, que se registraban antes del vuelo pero nunca subían al avión, al contrario de las maletas cargadas de droga.
El funcionario de aduanas habría recibido 45.000 euros (48.000 dólares) por “cerrar los ojos” y por cada maleta procedente de México, según una fuente próxima al caso.
El aduanero habría desfilado incluso en los Campos Elíseos el 14 de julio de 2022, con motivo de la fiesta nacional francesa, por habar participado en un importante decomiso de cocaína, según la fuente cercana al caso.
El consumo de cocaína producida en América Latina se dispara en Europa, destino privilegiado actualmente por los narcotraficantes en detrimento de Estados Unidos.
Numerosos fardos de cocaína, herméticamente cerrados, aparecieron entre finales de febrero e inicios de marzo en las playas del noroeste de Francia.