La secretaria general de la Organización de los Estados Americanos (OEA) solicitó este lunes que el juicio político al que se enfrenta el presidente ecuatoriano, el derechista Guillermo Lasso, ofrezca “garantías” y respete el debido proceso.
El Congreso de Ecuador, dominado por la izquierda, comienza este martes un juicio político contra Lasso para intentar destituirlo por presunta corrupción.
Este juicio puede desembocar en tres posibles escenarios: su destitución, la disolución del Congreso o su permanencia en el cargo.
Lasso se enfrenta en el Parlamento a fuertes corrientes opositoras como el movimiento afín al exmandatario Rafael Correa (2007-2017), quien vive en Bélgica, y Pachakutik, brazo político del poderoso sector indígena que hace un año ya intentó destituirlo.
En un escueto comunicado, la secretaría general de OEA insiste en la necesidad de que el juicio “ofrezca todas las garantías de justicia y respete las normas del debido proceso”.
“El principio debe ser el respeto de los mandatos constitucionales de presidentes electos por el voto popular, que los términos y plazos presidenciales se ejerzan de más pleno derecho, sin presiones ni amenazas”, añade la nota.
Lasso, un exbanquero de derecha de 67 años, es acusado de un supuesto peculado en el manejo de la naviera estatal Flota Petrolera Ecuatoriana (Flopec) mediante contratos establecidos entre 2018 y 2020.
Ecuador está sumido en una crisis política que el presidente atribuye a la oposición.
El mandatario, que se considera víctima de conspiraciones, afirmó durante la Cumbre Iberoamericana de marzo que la oposición busca llegar al poder “no por el voto, sino por un golpe de Estado parlamentario”.
La secretaría general de la OEA considera “fundamental que todos los actores que participen de este proceso actúen con la mayor responsabilidad y medida política e institucional”, señala el comunicado, retuiteado por Lasso.
