La primera parte de la subasta de joyas de la difunta multimillonaria austríaca Heidi Horten, viuda de un alemán que hizo fortuna por sus relaciones con el nazismo, terminó el miércoles más de 155 millones de dólares, requerida Christie’s.
Interrogado por AFP, Rahul Kadakia, director internacional de joyería de la famosa subastadora, calificó la venta de “éxito”, y subrayó que superó un récord establecido con la dispersión de los bienes de la estrella Elizabeth Taylor en 2011, que superó los 100 millones de dolares.
También superó el récord de venta de la colección “Maharajás y el esplendor mongol” en 2019, que superó también los 100 millones de dólares.
Christie’s inició este miércoles la polémica venta en Suiza de las joyas, pese a las críticas de organizaciones que luchan contra el antisemitismo y que piden se suspenda el remate.
La colección está compuesta por más de 700 joyas, y el valor total está estimado en más de 150 millones de dólares.
Este miércoles salieron a la venta en un remate presencial en Ginebra 100 piezas y otras 150 serán subastadas el viernes. El resto serán adjudicadas a compradores online en noviembre.
Antes del inicio de la subasta Kadakia había reiterado las explicaciones de por qué la casa aceptó rematar esta espectacular colección de joyas, tras una lluvia de críticas de varias organizaciones.
La procedencia de las joyas es irreprochable y “todos los beneficios de la venta se donarán a una fundación (el patronato Horten), que apoya causas filantrópicas”, insistió.
Además, dijo que “Christie’s hará una donación significativa” de los beneficios a instituciones judías y a la educación sobre el Holocausto, que afirmó que es de “vital importancia”.
Esta semana, el Centro Simon Wiesenthal, la oenegé conocida por rastrear criminales de guerra nazis prófugos, el Comité Judío Estadounidense (AJC) y el Consejo Representativo de Instituciones Judías de Francia (Crif) pidieron que se suspenda la venta.
La organización francesa calificó el martes la venta como “indecente”, ya que el marido de Heidi, Helmut Horten, construyó su fortuna en Alemania durante el gobierno de los nazis, partido en el cual militó.
Una de las joyas más destacadas de la colección de Heidi Horten, fallecida en 2022, es un anillo Cartier con un rubí “sangre de paloma” de 25,59 quilates, cuyo precio se estima entre 10 y 20 millones de dólares.
“Doblemente indecente”
Según la clasificación de Forbes, la fortuna de Heidi Horten ascendía a 2.900 millones de dólares. Pero el origen del dinero de Helmut Horten, propietario de una de las grandes cadenas de almacenes de Alemania, genera críticas.
En 1936, tres años después de la llegada al poder de Adolf Hitler, Horten se hizo cargo de la empresa textil Alsberg, después de la huida de sus propietarios, que eran judíos.
Después, tomó el control de varios negocios que pertenecieron a judíos que escaparon del Reich nazi. Posteriormente, Horten fue acusado de beneficiarse del expolio de propiedades a personas de origen judío.
“Esta subasta es doblemente indecente: no sólo los fondos utilizados para adquirir estas joyas proceden en parte de la ‘arianización’ de propiedades judías llevada a cabo por la Alemania nazi, sino que, además, la venta está destinada a financiar una fundación cuya misión es asegurar que pase a la posteridad el apellido de un antiguo nazi”, denunció el presidente de Crif, Yonathan Arfi.
El Centro Simon Wiesenthal pidió esta semana en un comunicado que “no recompensen a aquellos cuyas familias pudieron enriquecerse gracias a judíos desesperados perseguidos y amenazados por los nazis”.
El Comité Judío Estadounidense afirmó que la venta debe ser suspendida “hasta que se realice un esfuerzo serio para determinar qué parte de esta riqueza proviene de víctimas de los nazis”.