Un parlamentario del gobernante Partido del Poder Popular (PPP) de Corea del Sur propuso este viernes un proyecto de ley para prohibir la matanza y venta de carne de perro y gato con el objetivo de poner fin a su consumo.
La reciente propuesta nació de Tae Yong-ho, quien considera que “la cultura de comer perros y gatos debería ser erradicada en una era en la que 15 millones de personas (cerca de un cuarto de la población del país asiático) crían animales” domésticos, según declaraciones realizadas este viernes y citadas por la agencia local de noticias Yonhap.
La iniciativa, que cuenta con apoyo dentro del principal partido de la oposición, propone una revisión de la Ley de protección animal para prohibir los puntos anteriormente mencionados y permitir a las autoridades la concesión de subsidios para los negocios vinculados al consumo de este tipo de carne que hayan cerrado voluntariamente o cambiado su actividad de negocio.
La propuesta de Tae tiene lugar luego de que la primera dama surcoreana, Kim Keon-hee, pidiera en una entrevista endurecer la protección animal en el país y abandonar la práctica del consumo de carne canina.
La ONG AnimaNaturalis afirma que, para la ley coreana, la carne de perro no es legal. Sin embargo, agrega que no hay una legislación que penalice la matanza de canes.
De acuerdo a información de la agencia de noticias EFE, el consumo de carne de perro en Corea del Sur cayó enormemente en las últimas décadas a medida que ha ido en aumento el número de hogares que poseen mascotas.
Encuestas de años recientes citadas por EFE muestran que más del 80% de los surcoreanos nunca probó la carne de perro ni tampoco tiene intención de hacerlo, mientras la mayoría de los grandes mercados de este tipo de carne ya cerraron y el gobierno y diversas asociaciones lograron clausurar una gran cantidad de granjas y mataderos.
El último gobierno liberal estableció el año pasado un comité mixto para tratar de crear un “consenso social” sobre la necesidad o no de prohibir el consumo de carne de perro.
Aunque la mayoría de los surcoreanos nunca no ha comido este tipo de carne, una encuesta del año pasado también presenta que apenas un tercio de la población está a favor de que se prohíba su consumo y los partidarios de esta práctica argumentan que las personas deberían tener libertad para elegir lo que comen.
Según Humane Society International, Asia es el continente donde más extendido está el consumo de carne de perro. Se estima que hasta 30 millones de canes y 10 millones de gatos son sacrificados anualmente para consumo humano. La cifra incluye a muchas mascotas familiares, que a menudo son robadas ilegalmente de sus hogares y llevadas al matadero.
De acuerdo a Humane Society International, en Corea del Sur los perros mueren electrocutados, mientras que en otros lugares suelen ser apaleados, ahorcados o, más raramente, hervidos vivos.
La Organización Mundial de la Salud advierte que el comercio, sacrificio y consumo de perros plantea riesgos para la salud humana por triquinelosis, cólera y rabia.
La carne de perro está prohibida en Hong Kong, Filipinas, Taiwán, Tailandia y Singapur, al tiempo que Indonesia se declaró partidaria de prohibirla.
Fuente: INFOBAE