Tamara Adrián, mujer trans y activista de los derechos LGBTI en Venezuela, anunció este jueves su postulación a las primarias opositoras que determinarán el rival de Nicolás Maduro para las presidenciales de 2024.
Adrián, que en 2016 se convirtió en la primera diputada transexual en este país altamente conservador, recibe el apoyo del movimiento Unidos por la Dignidad, que en 2022 inició el largo proceso para convertirse en partido.
“Es un plan integral para que nadie sea dejado atrás”, dijo Adrián en rueda de prensa. “Cómo incorporar, romper las barreras que impone la sociedad a determinadas personas para incorporarse de manera efectiva al desarrollo económico, a las personas con discapacidad, a los adultos mayores, a las mujeres, a las personas LGTBI”.
Abogada y profesora universitaria de 69 años, Adrián concentró su discurso en la atracción de inversiones extranjeras y la mejora de los servicios públicos, sin abordar temas específicos de la comunidad.
Adrián ha acusado al Estado venezolano de “homofóbico por acción” y “omisión”.
En el Parlamento, entonces en control de la oposición (2015-2021), prometió impulsar una ley contra la discriminación y en favor de los derechos de la comunidad, que nunca se concretó.
Venezuela está atrasada en estos temas respecto a países como México, Argentina, Colombia, Brasil y Chile. La política venezolana es altamente conservadora, tanto en el chavismo gobernante como en la oposición.
Las primarias opositoras están previstas para el 22 de octubre.
Otros políticos como Juan Guaidó, que hasta enero fue considerado presidente por Estados Unidos; Henrique Capriles, que enfrentó a Hugo Chávez en 2012 y a Maduro en 2013; y María Corina Machado, del ala más radical de la oposición, han formalizado también su participación.