Con ocho meses de retraso, el presidente argentino Alberto Fernández se hará la foto este miércoles en la Casa Blanca con Joe Biden, con quien hablará de democracia, de comercio y de la sequía en su país.
La reunión tenía que haberse celebrado en julio de 2022 pero el presidente estadounidense Biden contrajo el covid-19 y se pospuso.
Finalmente será este miércoles a las 14H45 (18H45 GMT), coincidiendo con la segunda Cumbre por la Democracia, que reúne de forma virtual a aliados mundiales de Estados Unidos, y permitirá “reiterar la fortaleza de la alianza” entre Washington y Buenos Aires, afirma la Casa Blanca.
Biden y Fernández hablarán “de sus valores compartidos de inclusión, democracia y protección de los derechos humanos”, añade, en un contexto de crisis internas en varios países latinoamericanos.
El miércoles, el equipo argentino ultimó los detalles del encuentro en el Despacho Oval, que permitirá “afianzar el vínculo político, con una mirada estratégica respecto a este contexto global de incertidumbre a partir de la guerra, la pospandemia, cómo se han aumentado los precios de alimentos y energía y también los desafíos por el cambio climático y la transición energética”, afirmó el canciller Santiago Cafiero, citado en un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores.
Le seguirá una reunión de trabajo de los equipos técnicos de ambos países en la sala de gabinete.
“Es una posibilidad para la Argentina y Estados Unidos” para “repensar, relanzar y ajustar donde haga falta, cierta relación comercial que en algún punto se vino perdiendo”, añadió Cafiero.
El canciller insiste en que Argentina “tiene para aportar y puede ser un gran jugador” y juntos pueden “potenciar la producción de alimentos, ya que ambos países son grandes productores” y “desarrollar energía para el mundo en conjunto, potenciando toda la estructura que hace falta tanto para el desarrollo de petróleo y gas como para minerales estratégicos”.
Según fuentes de la delegación que acompaña al presidente argentino, “Estados Unidos considera a Argentina como un eje central para la región”.
El presidente centroizquierdista quiere proyección no solo a nivel regional, sino internacional.
En Washington Cafiero participó el martes con su homólogo Antony Blinken en un encuentro virtual para debatir iniciativas en busca de una solución a la guerra en Ucrania.
“El mundo quiere la paz en Ucrania, una paz que sea sostenible y de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional”, afirmó Cafiero, cuyo país, al igual que otros de la región, condenan la invasión rusa del territorio ucraniano pero se niegan a enviar armas a Kiev, en contra de los deseos de Washington.
No obstante, con 200 años de relaciones bilaterales a sus espaldas, ambos países mantienen lazos sólidos y los presidentes examinarán “cómo continuar asociándose para abordar los desafíos globales”, informa la Casa Blanca.
– Sequía histórica –
La tremenda sequía a la que se enfrenta Argentina será uno de los temas estelares de la reunión en el Despacho Oval a la luz del desespero y las pérdidas millonarias que está causando.
“El cambio climático trajo aparejados muchos cambios climáticos negativos en todo el mundo y en particular en Argentina se demuestran en la sequía histórica que estamos viviendo”, de modo que será uno de los ejes centrales del encuentro, según fuentes de la delegación que acompaña a Fernández.
La foto con Biden es importante, añaden, “por la situación financiera en Argentina teniendo en cuenta el reclamo argentino por la arquitectura financiera global”.
Y es que Fernández aboga por un pacto que favorezca los pagos de los endeudamientos y la aplicación de tasas más bajas.
Un mensaje que transmitirá a Biden, cuyo país es el principal accionista del Fondo Monetario Internacional (FMI), que ha aprobado un programa de ayuda para Argentina por un total de 44.000 millones de dólares a 30 meses.
De hecho Buenos Aires está pendiente de que el directorio ejecutivo del Fondo apruebe el desembolso de 5.300 millones de dólares, que ya cuenta con el visto bueno del personal técnico tras la cuarta revisión del paquete de ayuda al país sudamericano.
En un año electoral Argentina atraviesa una crisis inflacionaria y el gobierno de Fernández multiplica medidas para tratar de contener la subida de precios mientras busca cumplir las metas fiscales acordadas con el FMI.
Para Biden será la ocasión además de mimar la relación con un país amigo en un momento en el que China se esfuerza por extender su influencia en la región y el resto del mundo.
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