El gigante francés de la electricidad EDF detectó nuevas grietas en dos reactores, informó la Autoridad de Seguridad Nuclear (ASN) el jueves, lo que podría llevar a revisar el calendario de mantenimiento de las centrales francesas.
Los controles “detectaron la presencia de fisuras de fatiga térmica” en los conductos de urgencia “considerados como sensibles a la corrosión” en el reactor 2 de la central nuclear de Penly (noroeste) y el reactor 3 de la central de Cattenom (este), según una nota de la ASN actualizada el jueves.
En Penly 2, la fisura mide 57 mm de largo, lo que representa menos del 10% de la circunferencia, con una profundidad máxima de 12 mm. “Se trata de una profundidad importante”, indicó a la AFP Julien Collet, director general adjunto de la ASN.
La otra fisura en Cattenom 3, de 165 mm (que representa alrededor del cuarto de la circunferencia) con una profundidad máxima de 4 mm.
Este descubrimiento ocurre dos días después de la revelación da una fisura de tamaño nunca visto en el reactor de Penly 1.
Eso obligará a prolongar las paradas en otras instalaciones del país para realizar comprobaciones, señaló.
“No habrá paradas masivas de reactores durante meses, pero tendrá un impacto en términos de duración de las paradas”, declaró el miércoles a AFP Julien Collet, director general adjunto de la ASN.
Este fenómeno relacionado con la corrosión ya ha sido identificado desde finales de 2021 en varias instalaciones nucleares pero generaba grietas más pequeñas y en otros tipos de tuberías.
La energía nuclear es clave en Francia para la producción de electricidad. En 2022, representó el 62,7% del total, contra el 69% en 2021 y más del 70% años antes, según el informe anual de la empresa gestora de la red eléctrica de transporte RTE.
Pese a que desde el accidente nuclear de Fukushima en 2011 la tendencia en Europa era de reducir el peso del sector nuclear e incluso cerrar centrales, la invasión rusa de Ucrania cambió la tendencia.