El gobierno de Aruba propuso reabrir su frontera marítima con Venezuela a partir del 1 de mayo, después de cuatro años cerrada, informó este jueves el despacho de la primera ministra, Evelyn Wever-Croes.
“El 1 de mayo podríamos abrir fronteras marítimas, si se envía la documentación necesaria por parte de Venezuela a más tardar el 31 de marzo”, dijo en un comunicado la oficina de Wever-Croes, sin precisar los documentos requeridos.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó en febrero de 2019 el cierre de la frontera con las islas de los Países Bajos -Curazao y Bonaire, además de Aruba- para bloquear el paso de unos buques enviados por Estados Unidos con ayuda humanitaria, que el gobierno venezolano denunció como un intento de invasión.
Aruba y Curazao, que forma parte de Países Bajos pero tiene autonomía, junto a Bonaire, municipalidad de Holanda continental, comenzaron negociando en bloque la reapertura de la frontera.
Pero sin avances, decidieron seguir el proceso en separado.
Curazao por ejemplo ya dijo que retomará las conexiones marítimas y áreas en abril, mientras que Aruba anunció que desea hacerlo por fases.
“La primera fase será la frontera marítima para poder importar productos más baratos de Venezuela tales como frutas, verduras, comestibles y materiales de construcción. Eso nos ayudará a abaratar costos de vida”, según el gobierno.
En una segunda fase, esperan retomar la conexión aérea, pero para ello “aún no hay fecha” definida, continúa el texto. “Aquí si todavía hay mucho trabajo por hacer, y nuestros departamentos en el área de justicia, inmigración y aviación civil están trabajando en ello”.
Entre 2010 y 2019, Venezuela y las islas llegaron a tener un intercambio comercial que rondó en promedio unos 200 a 300 millones de dólares.
Las islas también llegaron a ser importantes destinos turísticos para los venezolanos, entre 100.000 y 150.000 al año. Sin embargo, desde el 1 de abril de 2020 se impuso visa para los nacionales de ese país, en medio de una masiva migración por la crisis.