Una bebé de siete meses fue rescatada durante las primeras horas del jueves de entre los escombros en Turquía, tras estar enterrada debajo de un edificio colapsado casi 70 horas.
En otro edificio también fue rescatado un niño de 12 años que sobrevivió, cuando las expectativas de hallar supervivientes se desvanecen tras haber pasado ya más de 72 horas de que ocurrió el sismo de 7,8.
Los equipos de rescate aún buscan a miles de personas que se sospecha están atrapadas entre los escombros de construcciones que colapsaron.
La esperanza disminuye ante las gélidas temperaturas y el paso de las horas. Tres días después del potente sismo que sacudió el lunes el sur de Turquía y el noroeste de Siria, la cifra de fallecidos sigue aumentando: el jueves el balance de muertos en los dos países superaba los 20.000.