El ejército de EUA trata de recuperar los restos del presunto globo de vigilancia chino derribado el sábado frente a las costas de Carolina del Sur.
Estados Unidos cree que el globo estaba monitoreando sitios militares sensibles.
Su descubrimiento desató una crisis diplomática, con EE. UU. El secretario de Estado Antony Blinken canceló inmediatamente el viaje de este fin de semana a China.
Las autoridades chinas negaron que se usara para espiar e insistieron en que era un barco meteorológico que se extravía.
Las relaciones entre China y Estados Unidos se han visto tensas por el incidente, y el Pentágono lo ha llamado una “violación inaceptable” de su soberanía.
El gobierno chino ha admitido que un segundo globo visto sobre América Latina el viernes es de China, pero afirmó que está destinado a uso civil, dijo la BBC.