Más de 60 muertos, caos aéreo y miles de ciudadanos sin luz
La fuerte tormenta invernal Elliot, calificada como “la tormenta del siglo” por la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, sigue atacando Estados Unidos, y ya ha causado al menos 28 muertos en Búfalo, la ciudad más afectada en el estado de Nueva York, informó CBS News.
Mientras, según NBC News, el número de muertos en el país ascendió a 65 este martes.
La tormenta provocó cortes de electricidad en varias ciudades de Estados Unidos, la cancelación de casi 20.000 vuelos y causó decenas de víctimas en nueve estados. En la ciudad más afectada, Búfalo, los equipos de emergencia encontraron cadáveres congelados en coches y bajo montones de nieve, y buscaban sobrevivientes “coche a coche”.
“Búfalo ha sido la zona cero de esta tormenta”, declaró este martes el alcalde de la ciudad, Byron Brown. El número de víctimas en la urbe casi alcanzó los 30, lo que casi iguala a la cifra de fallecidos en una famosa ventisca de 1977, lo que convierte la reciente tormenta en la mayor de los últimos 45 años.
El responsable del condado de Erie, Mark Poloncarz, calificó la tormenta como “la peor que probablemente he visto en la vida” y subrayó que “se puede ver, más o menos, la luz al final del túnel”, pero “esto no es el final todavía”, citó sus palabras The New York Times.
Según los datos del Servicio Meteorológico Nacional de EE.UU., reportados por Associated Press, hasta 23 centímetros más de nieve podrían caer en algunas zonas del oeste de Nueva York a lo largo de este martes.
Se prevé que el tiempo mejore a partir del miércoles. Sin embargo, el comisionado de Servicios de Emergencia del condado de Erie, Dan Neaverth Jr., sostuvo que las autoridades están preocupadas por la posibilidad de inundaciones esta misma semana debido al derretimiento de la nieve.
Los aeropuertos, en los diferentes estados afectados por la nieve, siguen sin poder restablecer su funcionamiento. Este martes más de 2.900 vuelos fueron cancelados, entre los que había alrededor de 2.500 de la compañía Southwest Airlines, informó CBS News.
El Departamento de Transporte Federal de EE.UU. declaró este lunes que investigará la cancelación de los vuelos, destacando su preocupación “por la tasa desproporcionada e inaceptable de cancelaciones y demoras de Southwest Airlines, así como por la falta de apoyo adecuado a los clientes que experimentan una cancelación o demora”.
La peor situación se observa en el Aeropuerto Internacional de Búfalo Niágara, donde, según los datos del Servicio Meteorológico Nacional, la capa de nieve alcanzó alrededor a 1,27 metros el lunes. Dicho aeropuerto permanecerá cerrado hasta el miércoles por la mañana.
La situación en las carreteras sigue siendo difícil, ya que cientos de coches, autobuses y otros vehículos quedaron bloqueados por la nieve, lo que dificulta la limpieza de las calles. Las autoridades han desplegado tractores de grandes dimensiones para facilitar el transporte de heridos a hospitales.
El ejecutivo del condado de Erie instó a los automovilistas a respetar la prohibición de circulación para no interferir con los trabajadores de emergencias y servicios públicos. Poloncarz agregó que los vehículos están “prácticamente cubiertos de nieve y hay que desenterrarlos y remolcarlos”, por eso la limpieza de las calles llevará mucho tiempo.
“Necesitamos que la gente siga teniendo paciencia, que no circule hoy por las carreteras y, en cuanto podamos, levantaremos la prohibición de circular por la ciudad de Búfalo”, afirmó el alcalde Brown.
Reportaron que este sábado, alrededor de 1,7 millones de usuarios en EE.UU. se quedaron sin suministro eléctrico debido al intenso frío, a la nieve y al viento. Actualmente, la situación del suministro eléctrico es estable en casi todos los estados, pero alrededor de 13.000 hogares y negocios en Maine y Nueva York este martes todavía seguían sin luz.
Los científicos afirman que la crisis del cambio climático puede haber contribuido a la intensidad de la tormenta. Así, Mark Serreze, director del Centro Nacional de Datos sobre Nieve y Hielo de la Universidad de Colorado en Boulder, declaró que la acumulación de vapor de agua en la atmósfera puede haber alimentado la tormenta invernal.