Un grupo de investigadores chinos acusó a la compañía estadounidense Starlink de violar la reglamentación de seguridad espacial en la órbita terrestre baja (OTB), ya que se ha observado que sus satélites están orbitando muy cerca unos de otros, informa South China Morning Post.
De acuerdo con la norma implícita de maniobras orbitales, para evitar las probabilidades de colisión, los dispositivos satelitales operados en la OTB no deben converger a una distancia inferior a los 10 kilómetros. Sin embargo, los especialistas reportaron en un estudio, publicado en la revista china Radio Engineering, que el pasado 30 de junio los satélites más modernos de Starlink estaban separados por apenas 4,9 kilómetros.
Asimismo, explicaron que esto no era una casualidad, sino una acción consciente por parte de la empresa, ya que, al estar equipados con tecnología de comunicación láser de alta velocidad, era necesario que estuvieran dentro de una línea de visión directa, a una distancia cercana, con el propósito de mejorar el envío y recepción de información entre ellos.
Nueva tecnología, más problemas
El equipo científico precisó que la implementación de esta tecnología surgió cuando se encontraron problemas en la infraestructura inicial de Starlink, puesto que, para establecer la comunicación entre satélites, era indispensable contar con estaciones terrestres, así como con barcos cuando estos sobrevolaban los océanos.
En un intento de solucionar esta situación, SpaceX lanzó en septiembre del año pasado una nueva generación de satélites con transmisores láser. Según estimaciones de los expertos, en un año se han colocado en órbita alrededor de 1.400 dispositivos satelitales, de los cuales, 880 están activos y brindando Internet de alta velocidad en algunos puntos del planeta.
Además, detallaron que teóricamente, esta tecnología permite establecer comunicaciones con satélites de su propia constelación, que se encuentren en la misma órbita o en otras cercanas, hasta una distancia de 2.500 kilómetros. No obstante, para lograr un mejor rendimiento de la información y reducir los retrasos en la señal, SpaceX está colocando estos satélites lo más cerca posible.
Un investigador espacial de Pekín, que no participó en la investigación, aclaró que existen sistemas activos para evitar colisiones, lo cuales podrían reducir el riesgo de accidentes entre satélites, aunque recalcó que “incluso la mejor tecnología puede fallar a veces”.
Los dispositivos de las constelaciones, que son operados tanto por empresas privadas y agencias gubernamentales, están aumentando considerablemente, lo que contribuye a la congestión de la OTB, además de incrementar el peligro de colisión. Ante esta situación, los científicos proponen “establecer una nueva ‘regla de tráfico espacial’ basada en nuevas tecnologías, de lo contrario, el desarrollo de las constelaciones chinas se verá seriamente restringido”.
En diciembre del año pasado, China se quejó ante la Comisión sobre la Utilización del Espacio Ultraterrestre con Fines Pacíficos (COPUOS) de la ONU por dos incidentes relacionados con los satélites de Starlink, los cuales ponían en peligro a los tripulantes de la estación espacial china.
Fuente: RT