Los restos del fallecido expresidente chino Jiang Zemin llegan a Pekín

Los restos del fallecido expresidente chino Jiang Zemin llegan a Pekín

China. Los restos del expresidente chino Jiang Zemin llegaron el jueves por la tarde a Pekín mientras en su ciudad natal, Yangzhou, los habitantes le rendían homenaje, al día siguiente de su fallecimiento.

Un avión fletado especialmente transportó sus restos desde Shanghái, donde el exmandatario, en el poder desde 1989 a 2003, falleció el miércoles a los 96 años, de leucemia y un fallo multiorgánico, según la prensa estatal.

El actual presidente, Xi Jinping, estaba presente en el aeropuerto de la capital, según la agencia de noticias estatal Xinhua.

Una ceremonia conmemorativa será organizada el martes en el Palacio del Pueblo en Pekín, anunció la televisión estatal CCTV.

El acto será retransmitido en directo y las regiones tiene que hacer lo posible “para que la mayoría de miembros y dirigente del partido, así como la población, la escuchen y vean”, precisó.

Ese día, se observarán tres minutos de silencio en todo el país, con las banderas a media asta y las actividades de ocio suspendidas.

– “Patriota y positivo” –

En la ciudad natal de Jiang, Yanghzou (este), cientos de personas se congregaron al anochecer para rendir homenaje a una de las figuras más destacadas de la localidad.

Muchos esperaban para depositar ramos de crisantemos blancos delante de su antigua casa. Algunos se arrodillaban o pronunciaban pequeñas oraciones, constataron periodistas de la AFP.

“Fue un muy buen dirigente. Contribuyó ampliamente a mejorar la vida de la gente en Yangzhou”, dijo a la AFP un hombre que sólo dio el nombre de Yan.

Li Yaling, una mujer de unos 60 años, dijo de él que fue un “gran dirigente, patriota y positivo”, que aportó “desarrollo económico”.

“Lo admirábamos mucho y sentimos una gran pérdida y nostalgia ahora que se ha ido”, agregó.

Agentes de seguridad en la zona invitaban a irse, educadamente pero con firmeza, a los grupos que estaban cerca del edificio para evitar multitudes, después de las históricas protestas que sacudieron el país este fin de semana contra las restricciones sanitarias.

En Shanghái, no lejos de Yangzhou, hacia las 12H45 (04H45 GMT), un convoy de vehículos salió del hospital donde habría fallecido el exmandatario, encabezados por un auto con una corona de flores amarillas. La caravana se dirigió luego hacia el aeropuerto de Hongqiao.

En imágenes que un vecino transmitió a la AFP se veía a un grupo de personas en la acera con crisantemos. Una de ellas llevaba una pancarta en la que se leía: “Buen viaje, viejo camarada de clase”.

En Hong Kong, cientos de personas hacían fila el jueves por la noche delante de la Oficina de Enlace entre la isla y la China continental, para depositar flores en memoria del expresidente, constató una periodista de la AFP.

“Actuó de manera que la economía de mercado formara parte de la tendencia dominante en China (…) sin esto, no habría ninguna esperanza para la democracia”, dijo Edward, un joven chino de 26 años que no dio su apellido.

– El “abuelo Jiang” –

La población china está dividida ante el legado de Jiang.

Aunque muchos de ellos recuerdan a un dirigente jovial, lleno de humor, que trajo aire nuevo a la dirección comunista, otros no olvidan que, bajo su mandato, la corrupción, las desigualdades sociales y la represión contra los militantes políticos aumentaron considerablemente.

Ya retirado, era visto con cierta ternura por las generaciones nacidas a partir de los años 1980. Muchos llamaban al antiguo líder “el abuelo Jiang”.

La televisión estatal CCTV afirmó el miércoles que las banderas estarían a media asta en varios edificios gubernamentales hasta que se celebrasen los funerales.

Los medios de comunicación estatales y empresas públicas cambiaron sus páginas web al blanco y negro, y también lo hicieron varias aplicaciones de los teléfonos celulares, como Alipay, Taobao o McDonald’s.

El miércoles, en apenas una hora, más de medio millón de personas habían comentado el anuncio de la CCTV de su fallecimiento en la plataforma Weibo (un equivalente chino de Twitter).

En el plano internacional, el presidente ruso, Vladimir Putin, fue uno de los primeros mandatarios extranjeros en rendir homenaje a Jiang, un “amigo sincero” de Rusia y un “estadista excepcional”.

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, dijo de él que fue un “firme defensor del compromiso internacional” de su país, y elogió su “calidez y apertura personal”.

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© Agence France-Presse