Científicos especializados han filmado y estudiado interacciones entre varias especies de peces y tiburones en los océanos Pacífico, Índico y Atlántico
Científicos de la Universidad de Australia Occidental han descubierto que el atún y otros grandes peces se frotan contra los tiburones para deshacerse de los parásitos, sugiere su artículo publicado en The Conversation.
Los científicos han filmado y estudiado interacciones de rascado entre varias especies de peces y tiburones en los océanos Pacífico, Índico y Atlántico, y descubrieron que los peces preferían frotarse sobre los tiburones en lugar de otros peces, según su investigación, publicada en PLOS One. El tamaño de los tiburones también tiene importancia para los peces, ya que los peces que raspaban sobre tiburones eran más grandes que los que raspaban sobre otros peces, lo que sugiere que el riesgo de depredación puede ser un factor limitante.
El secreto del tan arriesgado ‘juego con la muerte’ es que la piel del tiburón está formada por pequeñas estructuras parecidas a dientes, llamadas dentículos dérmicos.
Los científicos sugieren que el atún y otros peces utilizan el rascado para eliminar los parásitos y la piel muerta. Esta hipótesis está respaldada por el hecho de que los peces tienden a rascarse la cabeza y los costados más que otras partes del cuerpo, las cuales son las zonas más afectadas por los parásitos.
Los peces pelágicos (aquellos que se mueven independientemente de los movimientos del agua) son anfitriones de una gran variedad de parásitos, pero su entorno les brinda pocas opciones para eliminarlos.
El número de algunas especies de tiburones ha disminuido en un 92 % en las costas de Australia. Los científicos temen que su mayor extinción pueda complicar la lucha de los peces contra los parásitos en todo el mundo. Los biólogos han descubierto que el atún en todos los océanos del mundo tiende a rascarse sobre tiburones.
La disminución de las poblaciones de tiburones en el océano puede limitar estas interacciones, ejerciendo más presión sobre las especies que ya son altamente vulnerables, concluye el estudio.
Fuente: RT.