El 30 por ciento de las gasolineras de Francia, reportaron escasez de combustible, mediante los medios de comunicación de ese país, la falta de carburantes generó kilométricas filas en las estaciones de servicio, además de situaciones de tensión y violencia en varias ciudades.
Una huelga en las refinerías francesas complicó la situación, los trabajadores de seis de las ocho refinerías con las que cuenta el país están paralizadas, además de los empleados de numerosos depósitos de carburante.
Esto equivale a más de la mitad de las capacidades de refinado de Francia continental. El bloqueo de los depósitos de carburantes por parte de los huelguistas se endurece desde que el gobierno impuso servicios mínimos en la refinería ExxonMobil de Normandía.
Muchas gasolineras del sur de Francia, cerraron ya por falta de carburante, lo que lleva a algunos franceses a cruzar la frontera a España para llenar sus depósitos, del mismo modo que lo hacen los que viven en las zonas cercanas a Bélgica, Alemania, Suiza o Italia.