En un mensaje de texto hallado en su teléfono celular, Gabriel Carrizo afirmó que pensaba “matar al jefe” de la organización política La Cámpora
Gabriel Nicolás Carrizo, el cuarto detenido por el atentado contra la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, quedó aún más complicado luego de que la Justicia detectara en su teléfono celular un mensaje en el que reconoce que planeaba “matar al jefe de La Cámpora”, la agrupación política que lidera el hijo de la exmandataria, Máximo Kirchner.
El texto fue enviado a una persona agendada como ‘Jony White’, tan solo dos horas después del fallido ataque contra la exjefa de Estado, informaron este lunes fuentes de la investigación a la agencia Télam.
“Estamos pensando en matar al jefe de La Cámpora esta vez”. “Están llegando todos. Vamos a tener una reunión grupal”, le escribió Carrizo al tal White, una persona de estrecho vínculo con el detenido pero que no será identificada con su nombre real para no entorpecer el avance de las pesquisas.
Gabriel Nicolás Carrizo fue interrogado el viernes por la jueza federal María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rivolo. En su declaración, solo respondió preguntas de su abogado, y negó haber participado en la planificación del ataque.
Durante su testimonio, Carrizo dijo que se trató de “una broma” cuando le contó por mensaje a un familiar suyo que había aportado un arma calibre 22 para el atentado.
No obstante, el imputado se habría lamentado en sus mensajes de que el atentado “no tendría que haber terminado así”, sin cumplir su objetivo.
De momento, hay cuatro personas detenidas por su presunta responsabilidad en el hecho. Primero fue capturado Fernando Sabag Montiel, de 35 años, que intentó asesinar a la vicepresidenta disparándole fallidamente a la cabeza; posteriormente, las autoridades detuvieron a su pareja, Brenda Uliarte, quien también se encontraba en el lugar del incidente. Ambos fueron sometidos a prisión preventiva.
El martes de la semana pasada, la Policía detuvo a Agustina Díaz, amiga de Uliarte, quien pidió comparecer ante la Justicia el próximo miércoles para ampliar su declaración. Según se pudo comprobar mediante mensajes telefónicos de la detenida, Díaz le reprochó a Uliarte que el atentado hubiese salido mal.