Príncipe Harry y Meghan Markle no están invitados a la recepción por funeral de Isabel II

Príncipe Harry y Meghan Markle no están invitados a la recepción por funeral de Isabel II

El príncipe Harry y Meghan Markle, no se unirán a los otros miembros de la familia real en una recepción que tendrá lugar en el Palacio de Buckingham, para los líderes mundiales que viajarán a Londres para asistir al funeral de la reina Isabel II.

El duque y la duquesa de Sussex fueron inicialmente invitados al evento del domingo, aunque posteriormente el palacio ahora dice que la recepción es exclusivamente “para miembros activos que trabajan de la familia real”.

Organizada por el rey Carlos III y la reina Camila, la recepción dará la bienvenida a los jefes de estado e invitados oficiales extranjeros que han viajado a Londres para el funeral de estado de la difunta monarca. Se espera que unas 2.000 personas se reúnan en la Abadía de Westminster para el evento.

Los invitados también serán recibidos, además de por los reyes, por el príncipe y la princesa de Gales, la Princesa Real y el conde y la condesa de Wessex.

Aunque a principios de esta semana se anunció que solo los miembros activos de la familia real que tienen rango militar usarían sus uniformes de servicio para los eventos funerarios de la reina, el príncipe Harry, quien sirvió dos veces en Afganistán durante su carrera de 10 años en el ejército británico, vestirá su indumentaria militar para la vigilia.

Este cambio ha sido expresamente pedido por el rey Carlos, según una fuente de palacio, y la decisión se tomó sin que el Príncipe Harry solicitara un cambio, ya que él estaba preparado para usar cualquier tipo de vestimenta, por que lo importante era honrar a su abuela.

La pareja sí estuvo en el Palacio de Buckingham el martes cuando llegó el ataúd de la reina Isabel desde Escocia, y se unieron a los miembros de la familia real el miércoles para un servicio en Westminster Hall después de que el príncipe Harry se uniera a su padre, hermano y otros miembros de la familia en una procesión por Londres.