Reino, Unido. El príncipe Enrique rindió este lunes homenaje a su difunta abuela, la reina Isabel II, a la que se refirió como su “brújula”, y prometió “honrar” a su padre en su nuevo papel como rey Carlos III.
En su primera reacción pública desde la muerte de la reina el jueves, Enrique, de 37 años, quien abandonó la monarquía en 2020, afirmó estar “eternamente agradecido” a su abuela, a la que dijo echar “mucho de menos”.
“Abuela, aunque esta despedida final nos produce una gran tristeza, estoy eternamente agradecido por todos nuestros primeros encuentros, desde mis primeros recuerdos de infancia, hasta nuestro primer encuentro como Comandante en Jefe, pasando por el primer momento en que conociste a mi querida esposa y abrazaste a tus bisnietos”, continuó.
“Aprecio esos momentos compartidos contigo, y los muchos otros momentos especiales entre ellos. Ya te echamos mucho de menos, no solo nosotros, sino el mundo”, añadió el príncipe, que desde 2020 vive con su esposa Meghan en California.
“Y como se trata de los primeros encuentros, ahora honramos a mi padre en su nuevo papel de rey Carlos III”, afirmó, tras haber suavizado en los últimos días unas relaciones con su padre y su hermano mayor Guillermo que son notoriamente tensas.
Desde su conmocionante salida de la monarquía, Enrique siempre había subrayado que mantenía una buena relación con la reina.
En el momento de su muerte, el príncipe se encontraba en Londres para participar en actos benéficos y viajó inmediatamente a la residencia escocesa de Balmoral donde esta falleció.
Carlos III expresó su “amor” por Enrique y Meghan en su primer discurso. Y el sábado, Guillermo, de 40 años, ahora heredero del trono, y Enrique aparecieron juntos en Windsor, con sus respectivas esposas.
Fue la primera aparición pública de la pareja desde marzo de 2020, cuando los duques de Sussex abandonaron el Reino Unido.
Ambas parejas se encontraban en Windsor, donde viven Guillermo y Catalina con sus tres hijos y donde se alojan Enrique y Meghan durante su visita al Reino Unido.