Bruselas, Bélgica. Los países de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) pondrán en marcha el martes el proceso formal de ratificación de la adhesión de Suecia y Finlandia a la alianza militar transatlántica.
Los aliados firmarán los protocolos de adhesión de suecos y finlandeses.
Anunció la OTAN este lunes en un comunicado.
La ministra sueca de Relaciones Exteriores, Ann Linde, y su homólogo finlandés, Pekka Haavisto, participaron este lunes en la sede de la OTAN en Bruselas de reuniones de última hora sobre la firma de los protocolos prevista para el martes.
El anuncio de la intención de Suecia y Finlandia de sumarse a la poderosa alianza militar promovió un veto inicial por parte de Turquía, un miembro esencial del bloque, que finalmente dio su acuerdo de principio.
Durante la cumbre que la OTAN hace una semana en Madrid, Turquía presentó una serie de exigencias para permitir la adhesión de suecos y finlandeses, y dejó claro que ello sólo ocurrirá si los dos países cumplen los compromisos negociados.
De esa forma Turquía aceptó que la OTAN de los primeros pasos en el lanzamiento formal del proceso de adhesión, aunque el presidente Recep Tayyip Erdogan advirtió sobre las condiciones negociadas para que ello ocurra.
Turquía vetaba la adhesión de Suecia porque ese país concedía refugio seguro a personas que el gobierno turco considera “terroristas”, y para eludir el veto Suecia prometió extraditar de retorno a Turquía a 73 “terroristas”.
Los devolverán, lo prometieron. Está en los documentos escritos. Cumplirán su promesa.
Dijo Erdogan, sin más detalles.
Turquía pide desde hace varios años en Estocolmo la extradición de activistas kurdos y personas cercanas al movimiento fundado por el predicador Fethullah Gülen, acusado por las autoridades turcas de fomentar el intento de golpe de Estado de julio de 2016.
Suecia y Finlandia son miembros de la Unión Europea pero el acuerdo firmado en Madrid “solo compromete a estos tres países”, dijo este lunes Nabila Massrali, la portavoz del jefe de la diplomacia europea Josep Borrell.
Según Massrali, “Turquía tiene una interpretación amplia de su legislación antiterrorista y aprovecha la oportunidad para arrestar a todos aquellos que se pronuncian críticamente, periodistas, abogados, defensores de los derechos humanos”.