Japón y Australia han instado a su población a apagar la luces tres horas al día como medida ante la escasez de energía que enfrentan.
Japón pidió a las personas que viven en Tokio, la capital, y sus alrededores que usen menos electricidad y, específicamente, que apaguen luces innecesarias durante tres horas a partir de las 3 de la tarde.
Mientras, en Australia se ha dicho a los habitantes de Nueva Gales del Sur -un estado que incluye a la ciudad más grande del país, Sidney- que no deberían usar electricidad entre las 6 de la tarde y las 8 de la noche.
Ambos países se enfrentan en estos días a unas condiciones climáticas extremas.
Durante el fin de semana, la temperatura en el centro de Tokio superó los 35°C, mientras que la ciudad de Isesaki, al noroeste de la capital, registró un récord de 40,2°C, la temperatura más alta jamás registrada en junio para Japón.
En el caso de Australia, la ola de frío ha provocado que las temperaturas desciendan “entre 6 y 10 grados por debajo de lo normal”, dijo Sarah Scully, experta de la Oficina Australiana de Meteorología, en su cuenta de Twitter.
Aunque los proveedores de electricidad están trabajando para aumentar el suministro, el ministerio dijo que la situación era “impredecible” a medida que suben las temperaturas.
El suministro de energía de Japón ha sido escaso desde que, el pasado mes de marzo, un terremoto en su región nororiental obligó a algunas plantas de energía nuclear a suspender sus operaciones.
En el caso de Australia, hablamos de uno de los mayores exportadores de carbón y gas natural licuado del mundo. Tres cuartas partes de la electricidad del país todavía se generan con carbón.
Ya sea por la necesidad de poner el aire acondicionado o la calefacción, en ambos paísesha subido la demanda de electricidad. Y, a la vez, el precio. Y esto es una tendencia mundial.