La guerra en Ucrania podría facilitar que la fabricación ilícita de drogas prospere, advirtió la ONU este lunes, habida cuenta de lo ocurrido en otros conflictos.
“Las informaciones de Oriente Medio y del sureste asiático tienden a indicar que las situaciones de conflicto pueden actuar como un imán para la fabricación de drogas sintéticas que, de hecho, pueden producirse en cualquier parte”, subraya la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés) en su informe anual.
“Una consecuencia que puede ser aún más importante cuando la zona de conflicto se encuentra cerca de mercados de consumidores”, añade.
Antes de la invasión rusa, Ucrania contaba con un número creciente de laboratorios de anfetaminas, precisó la experta Angela Me, entrevistada por AFP. Cerca de 80 fueron desmantelados en 2020, en comparación con los 17 del año anterior.
Una capacidad de producción que “podría extenderse si el conflicto persiste”. “La policía ya no está ahí para detener la actividad de los laboratorios”, explicó.
La guerra también puede “perturbar los itinerarios del tráfico”, apunta el informe, que cita un posible declive en Ucrania desde principios de 2022.
Además, Angela Me llamó a vigilar la situación en Afganistán, que en 2021 produjo el 86% del opio mundial.
En abril, el jefe supremo de los talibanes ordenó que se prohibiera el cultivo de la amapola. “Debemos ver si eso se traducirá en una reducción drástica”, dijo la experta, o si, por el contrario, los campos ilícitos se desarrollarán, dado el deterioro de las condiciones socioeconómicas del país.
Cualquier cambio tendrá “repercusiones en casi todas las regiones del mundo”, advierte la ONU en su informe.
Unos 284 millones de personas -una de cada 18 en la franja de edad que va de los 15 a los 64 años- consumieron drogas en 2020, es decir, un 26% que diez años antes.
La mayoría eran hombres, pero las mujeres recurren fuertemente a estimulantes como las anfetaminas (ATS), pero están “insuficientemente representadas en el tratamiento”, lamentó Angela Me.
La especialista mencionó “un doble estigma” y la necesidad de poner en marcha lugares en los que las mujeres se sientan “seguras” y puedan permanecer con sus hijos.
Por otro lado, la producción de cocaína batió un nuevo récord, alcanzando las 1.982 toneladas en 2020.
El informe de la UNODC, que es una “evaluación preliminar”, se basa en informaciones que el organismo recabó entre sus Estados miembros, sus propias antenas y el análisis de fuentes abiertas, medios de comunicación e informes institucionales.