La guerra en Ucrania ha agravado la crisis mundial de refugiados y el riesgo de hambruna, no solamente al crear seis millones de refugiados suplementarios, sino también al hacer que se disparen los precios de productos de base, en particular de los cereales.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) de la ONU advirtió el domingo que se veía obligado a aplicar racionamiento en la ayuda a los refugiados de África del este y del oeste, a falta de adecuada financiación y pese a que las necesidades son crecientes.
El 75% de los refugiados apoyados por el PMA en África del este han visto sus porciones reducidas hasta un 50%, declaró la agencia de la ONU.
Los más afectados son los que se hallan en Etiopía, Kenia, Sudán del Sur y Uganda
“Estamos obligados a tomar la desgarradora decisión de reducir las raciones alimentarias para los refugiados que dependen de nosotros” declaró David Beasley, director ejecutivo del PMA
En África occidental, en especial en Burkina Faso, Camerún, Chad, Mali, Mauritania y Niger, el PMA ha reducido “de manera significativa” las raciones. Y las perturbaciones son inminentes en varios otros países, advierte Beasley.
El martes pasado, el PMA dijo necesitar de forma urgente 426 millones de dólares para los seis próximos meses para evitar una hambruna en Sudán del Sur, donde mas de dos tercios de la población necesita una ayuda humanitaria. Se trata de 8,3 millones de personas, incluidos a refugiados, que se enfrentan este año a una “grave hambruna aguda”
La guerra en Ucrania ha agravado la crisis mundial de refugiados y el riesgo de hambruna, no solamente al crear seis millones de refugiados suplementarios, sino también al hacer que se disparen los precios de productos de base, en particular de los cereales.