El cambio climático amenaza con generar sequías, pérdida de cultivos y subida del nivel de agua, y ya ha generado muertes en los países más pobres, por lo que aumentan los llamados para que las naciones ricas aporten financiamiento para adaptarse a esta nueva realidad.
El financiamiento de las “pérdidas y los perjuicios” que sufren los países más pobres está en el centro de las negociaciones internacionales que se celebran esta semana en Bonn, en Alemania, en preparación de la COP27 en Egipto en noviembre.
“El impacto del cambio climático no tiene fronteras”, recordó la responsable del clima de la ONU, Patricia Espinosa, que destacó que las consecuencias afectan de forma “desproporcionada” a los países más vulnerables.
En el momento de la reunión, el Cuerno de África sufre una sequía que amenaza con una hambruna a millones.
Aunque no se pueda establecer una relación de causalidad entre este fenómeno con el calentamiento global “este tipo de impactos representa un argumento sólido para el fondo ‘pérdidas y perjuicios'”, dijo a AFP Mohamed Adow, director del centro de estudios Power Shift Africa.
“Los países ricos que bloquean el proceso sobre ‘perdidas y perjuicio’ van a teneren sus manos más sangre de víctimas del cambio climático”, agregó.
Los países en desarrollo quieren un fondo específico para ayudar a los que tienen menos responsabilidad en el cambio climático para enfrentar su impacto, pero las naciones más prósperas, lideradas por Estados Unidos, prefieren apoyar iniciativas ya existentes.
En la cumbre del clima COP26 de Glasgow a finales de 2021, los países pobres aceptaron aplazar un diálogo formal sobre el tema hasta 2024. Pero sin objetivos precisos, esto puede convertirse en un mero foro de discusión.
“Se nos ofreció un proceso que no tiene ni objetivos, ni visiones claras”, lamenta Michai Robertson, representante de la Alianza de Pequeños Estados Insulares.
Tras varios días de discusiones en Boon, varios países emergentes piden que este tema esté oficialmente en la agenda de la COP27.
El alza de la temperatura de cerca de 1,2°C en promedio con respecto a la era preindustrial ya ha generado perjuicios considerables, advirtieron los expertos del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), que señalaron que esto se agravará con cada décima de grado demás en el termómetro.