El teatro Bolshói de Moscú anunció la retirada de su programa de espectáculos previstos en mayo los de dos directores que abandonaron Rusia y expresaron públicamente su oposición a la ofensiva en Ucrania.
En un mensaje publicado el lunes en Telegram, el prestigioso teatro anunció que el ballet “Nureyev” de Kirill Serebrennikov y la ópera “Don Pasquale” de Timoféi Kuliabin serían remplazadas en las seis representaciones previstas durante los días feriados de mayo.
Se ignoran las razones de este cambio. El Bolshói, interrogado por la AFP, no hizo comentarios.
Director y cineasta respetado, Kirill Serebrennikov está instalado en Berlín.
Conocido por su apoyo a las personas LGBT+, el artista fue condenado en 2020 por desvío de fondos a tres años de prisión con suspensión de pena, y prohibición de abandonar el país.
Su ballet sobre Rudolf Nureyev, prodigioso bailarín que huyó de la URSS hacia Europa, fue reemplazado por “Spartacus”, una pieza muy marcial. A principios de abril, el teatro había presentado este histórico ballet en apoyo a la operación militar rusa en Ucrania.
Kirill Serebrennikov no se mostró sorprendido por la cancelación.
“Este ballet es sobre el anhelo de libertad de un hombre. Libertad para crear y libertad para vivir”, declaró a la AFP por escrito. “Estos días, ‘Nureyev’ es inapropiado e inadecuado para el escenario del Bolshói. Les asusta que se hagan asociaciones innecesarias y los artistas incómodos”, añadió, comparando la cancelación con las medidas tomadas en la antigua Unión Soviética.
A fines de abril, Serebrennikov afirmó a la AFP haber dejado recientemente su Rusia natal por una cuestión de “conciencia” y había criticado duramente la ofensiva rusa en Ucrania.
Timoféi Kuliabin, joven e innovador director, también abandonó Rusia y publicó varios mensajes críticos sobre el conflicto en las redes sociales.
Tras el inicio de la ofensiva, el 24 de febrero, varios grandes bailarines del Bolshói han abandonado el teatro.
Entre ellos figura la bailarina estrella Olga Smirnova y varios extranjeros.
El Met de Nueva York ha puesto fin a las coproducciones y a la gira al extranjero del Bolshói, acontecimiento anual muy esperado.