El parlamento de Indonesia aprobó este martes un proyecto de ley largamente esperado contra la violencia sexual, tras un aumento en las denuncias durante la pandemia del coronavirus.
Activistas por los derechos de las mujeres han reclamado por la falta de vías para que las víctimas de violencia sexual obtengan justicia, en un país donde las agresiones son consideradas un asunto privado.
Defensoras de los derechos de las mujeres aplaudieron y gritaron cuando el presidente legislativo, Puan Maharani, anunció la aprobación de la iniciativa en una sesión plenaria.
“Esta ley es una manifestación real de los esfuerzos del país por evitar toda forma de violencia sexual y cuidar, proteger y rehabilitar a las víctimas, así como hacer justicia”, dijo en la sesión Bintang Puspayoga, ministra de la Mujer y la Niñez.
La ley busca combatir los crímenes sexuales y establecer un marco legal para las víctimas, incluso en casos de violación marital. Fue redactada hace una década y presentada en 2016, pero enfrentó numerosos obstáculos.
Grupos islámicos señalaron que promueve la promiscuidad y legisladores conservadores pidieron incluir la criminalización del sexo extramarital y las relaciones LGBT, en el país de mayoría musulmana más grande del mundo.
La ley se enfoca en el manejo de la violencia sexual, desde la prevención hasta la recuperación de la víctima, y hace obligatoria la compensación a las víctimas.
El abuso físico sexual, dentro y fuera del matrimonio, acarrea ahora una sentencia máxima de 12 años de prisión y el matrimonio forzado, incluso cuando involucra menores, conlleva una sentencia máxima de nueva años de cárcel.
La Comisión Nacional de la Violencia Contra la Mujer reportó en 2021 338.496 casos de agresión de género, un aumento de 50% desde el año anterior.