La Asamblea General de las Naciones Unidas suspendió este jueves a Rusia del Consejo de Derechos Humanos del organismo a raíz de la invasión de Ucrania.
De los 193 miembros de la asamblea, 93 votaron a favor, 24 en contra y 58 se abstuvieron, lo que puso en evidencia un debilitamiento de la unidad internacional contra Rusia. Es la segunda suspensión de un país del consejo, después de Libia en 2011.
Las abstenciones, condenadas por Kiev, no se tomaron en cuenta porque para una suspensión basta con el voto favorable de dos tercios de los países que se pronuncian a favor o en contra.
Entre los países que votaron en contra figura China, que lo considera una “iniciativa precipitada” que “añade leña al fuego” y un “precedente peligroso”. También se opusieron Irán, Kazajistán, Bolivia y Cuba. Venezuela llamó a votar en contra pero ha perdido su derecho a voto debido a la acumulación de pagos pendientes.
Como era de esperar, Rusia, Bielorrusia y Siria se opusieron a la resolución.
Pese a las presiones en los últimos días de Rusia para que los países votaran en contra, varios estados africanos, como Sudáfrica y Senegal, han optado por abstenerse al considerar que la resolución que suspende a Moscú “prejuzga los resultados de la comisión de investigación” creada en marzo por el Consejo de Derechos Humanos.
Brasil, México e India, actualmente los tres miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, también se abstuvieron.
El embajador brasileño ante la ONU, Ronaldo Costa Filho, dijo: “Brasil ha decidido abstenerse en la votación de hoy porque cree que se debe permitir que la comisión de investigación complete su investigación independiente para que se puedan determinar las responsabilidades”.
Añadió que su país, “profundamente preocupado” por las supuestas violaciones de derechos humanos en Ucrania, está “totalmente comprometido en encontrar vías para un cese inmediato de las hostilidades y promover un diálogo real que conduzca a una solución pacífica y sostenible”.