AFP.- El exmilitar colombiano Marco Antonio Palacios, señalado como presunto responsable del magnicidio del presidente de Haití, Jovenel Moïse, el pasado 7 de julio de 2021, no será extraditado a su país de origen sino a EE.UU., según confirmó su abogado defensor, Nelson Romero.
En declaraciones a Blu Radio, Romero aseguró que su defendido fue interceptado por la Policía Internacional (Interpol) durante la noche del lunes 3 de enero en el aeropuerto de Panamá, cuando se encontraba en proceso de extradición a su país, donde sería imputado por el magnicidio de expresidente haitiano.
El abogado explicó que Palacios debía llegar al Aeropuerto el Dorado en Bogotá, ya que Jamaica había procedido a extraditarlo tras su detención en octubre de 2021. El exmilitar también se encontraba solicitado por Haití, pero la justicia jamaiquina decidió enviarlo a Colombia.
La detención de Palacios en Panamá se habría producido en respuesta a una circular roja de Interpol emitida por EE.UU., explicó Romero, quien denunció que “las autoridades colombianas no han hecho nada o casi nada” por los connacionales que están en Haití acusados por el magnicidio.
El abogado también afirmó que la declaración de Palacios en EE.UU. “va a ayudar a la investigación” y que será en Miami donde “se va a conocer realmente la verdad”. “Va a declarar sin presión, a diferencia de los colombianos que están en Haití”, dijo.
Días antes, el exprimer ministro interino de Haití, Claude Joseph, lamentó la medida y dijo que el gobierno de su país no había dado las “pruebas suficientes para establecer la participación del mercenario en el asesinato”. Además, calificó la extradición como “un duro golpe para la investigación” y aseguró que no había “voluntad política” para resolver el caso.
En la víspera, la policía haitiana otorgó la libertad condicional a cuatro policías investigados por el magnicidio, identificados como Jacques Sincère, Cicéron Cedernier, Eddy Amazan y Willer Cangé, detalla el diario local Haiti24, que indica que la decisión fue emitida por el juez encargado del caso, Garry Aurélien, sin que se otorgaran mayores detalles.
Por el caso continúan detenidas unas 40 personas, la mitad serían mercenarios de origen colombiano que integraron las filas del Ejército de ese país.