El papa busca estrechar lazos con iglesias ortodoxas

El papa busca estrechar lazos con iglesias ortodoxas

El papa Francisco llegó el sábado a Atenas para la segunda parte de su viaje de cinco días a Chipre y Grecia con el objetivo de reforzar los recién reparados lazos entre el Vaticano y las iglesias ortodoxas griegas. Está previsto que el pontífice participe en reuniones sobre una alianza emergente entre las ramas occidental y oriental del cristianismo para responder al cambio climático y a otros grandes problemas globales.

El viaje papal a la región ha puesto también el foco sobre la difícil situación de los solicitantes de asilo coincidiendo con el endurecimiento de las políticas de control fronterizo en algunas naciones europeas. El papa Juan Pablo II se convirtió en 2001 en el primer líder de la Iglesia católica en visitar Grecia en más de 1.200 años.

Francisco ha acelerado las iniciativas interconfesionales mientras las iglesias católica y ortodoxa griega intentan dejar atrás siglos de competencia y desconfianza en favor de la colaboración. En Atenas, Francisco se reunirá con el líder de la Iglesia ortodoxa griega, el arzobispo Ieronymos, además de con el primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, y la presidenta del país, Katerina Sakellaropoulou. Las autoridades prohibieron las protestas y los grandes actos públicos en el centro de Atenas durante el fin de semana y dijeron que hasta 4.000 agentes de policía velarán por la seguridad en la ciudad durante la visita del papa.

En su encuentro con el liderazgo de la iglesia ortodoxa en Chipre en la víspera, Francisco lamentó los “siglos de división“ entre las dos confesiones. En octubre, el papa invitó a los líderes del cristianismo ortodoxo y de otras religiones al Vaticano para firmar una declaración sobre el clima. Los partidarios de una mayor cooperación entre el Vaticano y los ortodoxos sostienen que podría ayudar a las asediadas comunidades cristianas en Oriente Medio y en el Norte de África.

Los ortodoxos, por su parte, también buscan alianzas en medio de una disputa cada vez más profunda por la independencia de la iglesia ucraniana, que históricamente ha estado gobernada por la rusa. “Creo que la presencia del papa en Grecia y Chipre indica una vuelta a la relación normal que deberíamos tener (…) para poder avanzar hacia lo más importante de todo: la unidad del mundo cristiano“, dijo a The Associated Press Ioannis Panagiotopoulos, profesor asociado de divinidad e historia eclesiástica en la Universidad de Atenas.

“Así que este viaje es muy relevante y significa que podemos tener una discusión real sobre los asuntos importantes, como las migración“, señaló. Francisco se reunirá con miembros de la pequeña comunidad católica del país y el domingo regresará a la isla de Lesbos, en el Mar Egeo, cinco años después de su visita a sus campos de detención de migrantes. En aquella ocasión, una docena de sirios regresaron con él a Roma en su avión. La visita terminará el lunes.