El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, un católico practicante, rindió homenaje al papa Francisco este domingo en Roma, una “persona verdaderamente respetable” que “dio mucho consuelo a mi familia cuando murió mi hijo”, confesó.
“Es una persona verdaderamente respetable y genuina”, añadió el presidente durante su conferencia de prensa al término de la cumbre del G20, que se celebró este fin de semana en la capital italiana.
Dedicando mucho tiempo al tema, Joe Biden, contó la relación que se creó con el papa argentino cuando perdió su hijo Beau, fallecido a los 46 años, el 30 de mayo del 2015, de un cáncer.
“Cuando murió mi hijo Beau (…) el papa Francisco estaba visitando Estados Unidos”, recordó.
“Nos conocimos en un hangar del aeropuerto de Filadelfia y él conversó con mi familia bastante tiempo, entre 10 y 15 minutos, sobre mi hijo Beau”, dijo.
“No solo hablaba de asuntos en general. Sabía cosas sobre él. Sabía lo que había hecho. Sabía quién era. Sabía dónde había estudiado (…). Eso tuvo un fuerte efecto catártico en sus hijos y en mi esposa, en toda mi familia. Ha significado mucho”, contó el mandatario.
El papa Francisco “representa todo lo que aprendí sobre el catolicismo cuando era niño e iba a la escuela”, dijo.
“Es una persona muy respetable y nos hemos mantenido en contacto”, concluyó.
La víspera de la apertura de la cumbre del G20, Biden, el segundo presidente católico en la historia de Estados Unidos después de John F. Kennedy, mantuvo una larga conversación con el papa.
La audiencia, que duró más de una hora, ha sido una de las más largas concedidas por un pontífice a un presidente estadounidense.
Era el cuarto encuentro entre Biden y el pontífice, pero el primero como presidente.
El mandatario, que estaba acompañado por su esposa Jill Biden, vestida con una mantilla negra, ha relatado en repetidas ocasiones cómo encontró en la fe la fuerza para superar varios duelos familiares, y que suele llevar el rosario de su amado hijo.
Biden, que casi nunca falta a la misa dominical, sufre la dura ofensiva de un sector de la iglesia estadounidense para que se prive de la comunión a los líderes políticos que apoyan el aborto, entre ellos el mismo mandatario.
El presidente de EEUU aseguró que Francisco le dijo durante el encuentro que es “un buen católico” y que puede “seguir recibiendo la comunión”.
Según medios católicos locales, Biden recibió la comunión el sábado durante una misa en la iglesia romana de San Patricio, un día después de que Francisco lo alentara a seguir recibiendo la comunión pese a su abierto apoyo al aborto.