BARCELONA .- El turismo se ha unido en torno a un llamamiento común a la acción, que esboza una visión compartida del futuro sostenible e inclusivo del sector.
En el segundo día de la Cumbre Mundial del Futuro del Turismo en Barcelona (26-27 de octubre), la OMT se ha sumado a otros organismos de Naciones Unidas, ministros y personalidades de los sectores público y privado, para acordar aprovechar la oportunidad de reactivar el turismo y mejorarlo mientras se recupera de los impactos de la pandemia.
Mientras los líderes mundiales se preparan para reunirse en Glasgow con motivo de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), la Declaración de Barcelona afirma que “el turismo debe ir a la cabeza de la adaptación, de una mayor sostenibilidad y de la transición hacia un crecimiento libre de emisiones”.
Entre los principales actores que respaldan el plan están la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD) y la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), junto con destacadas empresas, destinos y gobiernos.
El secretario general de la OMT, Zurab Pololikashvili, subrayó la necesidad de “un liderazgo claro que garantice la financiación necesaria para construir un futuro más sostenible”. Y añadió que “el llamamiento de Barcelona a la acción es una prueba de que nuestro sector está preparado para liderar el camino, afrontar los retos y superarlos, y construir un turismo mejor para todos”.
El llamamiento a la acción se anunció al cierre de esta cumbre de dos días de duración. Organizada por la Advanced Leadership Foundation y la Fundación INCYDE de las Cámaras de Comercio españolas, con el apoyo de la OMT, fue el primer gran evento desde el inicio de la pandemia con la vista puesta en el futuro.
Sus focos de atención han estado alineados con muchas de las prioridades clave del trabajo de la OMT, especialmente la búsqueda de una financiación cada vez más efectiva para ayudar a transformar el sector, así como la importancia de la innovación y el emprendimiento.
Los diez puntos establecidos son :
PARA LAS PERSONAS
El turismo puede ser fuente de oportunidades y empoderamiento. Debe prestar atención a las necesidades de las comunidades y proporcionar trabajo decente para todos, especialmente para los jóvenes, las mujeres y los grupos más vulnerables de nuestra sociedad. El turismo del futuro debe hacer suyos los valores locales, respetar las culturas y preservar y celebrar nuestro patrimonio único y compartido, adaptándose a la vez a la digitalización y apoyando la adquisición de nuevas competencias profesionales.
El Código Ético Mundial para el Turismo ofrece un marco al desarrollo y el crecimiento del turismo, anteponiendo siempre a las personas, mientras que el Código Internacional de la OMT para la Protección de los Turistas aclara las responsabilidades del sector con las personas, ofreciendo tranquilidad y restableciendo la confianza en los viajes.
PARA EL PLANETA
El turismo debe estar a la altura de sus responsabilidades en relación con la acción por el clima y debe hacerlo de manera urgente. Todos los agentes turísticos deben evaluar y abordar el uso que hace el turismo de la energía, el territorio, el agua y los recursos alimentarios, así como de las emisiones de carbono que se le atribuyen. Es hora de desarrollar nuevos modelos para reformular y transformar el turismo y acelerar el progreso hacia la sostenibilidad y el crecimiento sin emisiones, a la vez que se facilita una financiación innovadora y la infraestructura de inversión necesaria para que esas intenciones ambiciosas se conviertan en una realidad.
Es preciso avanzar también en la medición y la transparencia respecto a las emisiones de CO2 del turismo, y acelerar la descarbonización para avanzar hacia un sector turístico sostenible que promueva los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) manteniendo a la vez su rentabilidad.
PARA LA PROSPERIDAD
El turismo es un pilar fundamental del crecimiento económico y el bienestar, uno de los mayores empleadores del mundo y un generador importante de oportunidades y empoderamiento. El sector debe comprometerse a salvaguardar las empresas y los medios de vida. Los destinos y las compañías deben recibir apoyo para incrementar su competitividad diversificándose y mejorando su resiliencia gracias a la adquisición de competencias, la innovación y la transformación digital.
EL LLAMAMIENTO A LA ACCIÓN DE BARCELONA
Todas y todos nosotros, los abajo firmantes, nos comprometemos a trabajar para:
- Responder a la emergencia económica y social causada por la pandemia de COVID-19, apoyando a las empresas y conservando y creando empleo.
- Promover políticas y estrategias turísticas que garanticen el uso sostenible de los recursos, incluida la planificación y la gestión de un turismo responsable, involucrando plenamente en su formulación a las
comunidades locales. - Integrar plenamente el turismo en las políticas nacionales y locales para impulsar la prosperidad, la sostenibilidad y un equilibrio económico dinámico, así como ahondar en la implicación del sector a la hora
de abordar sus efectos en términos de vivienda, utilización del espacio público, calidad del empleo y salarios, exclusión social, segregación espacial, problemas ambientales o saturación de infraestructuras. - Reforzar la identidad cultural de los destinos, promoviendo la capacidad de crear mercados que sean sensibles a los valores culturales, potenciando la preservación de la identidad y alentando sinergias entre la cultura, especialmente la economía creativa, el turismo y el bienestar social. Y, junto a ello, promover también el turismo como experiencia personal positiva tanto para los turistas como para las comunidades receptoras.
- Poner en el centro de la planificación y la gestión del turismo la sostenibilidad económica, social y ambiental, reforzando ámbitos tales como la medición, la regulación, la inversión y la comunicación.
- Impulsar iniciativas que promuevan el progreso, la integración regional y la cohesión social y estimulen el compromiso de las empresas con el planeta, los lugares y las personas, ya sean ciudadanos, visitantes o
trabajadores. Alentar un nuevo modelo de gobernanza sustentado por la participación ciudadana, la coordinación público-privada y unos marcos de colaboración y liderazgos sólidos. - Incentivar la digitalización del turismo, la aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación y la aplicación de programas inteligentes para los destinos, que generen valor e impulsen la sostenibilidad.
- Promover un mecanismo de cooperación internacional para preparase frente a crisis y gestionarlas, de modo que se apuntale la resiliencia del sector y se reduzca su vulnerabilidad a futuras situaciones de crisis.
- Mejorar la formación, la educación, el conocimiento y la investigación como palancas de la innovación, la competitividad, la inclusión, la responsabilidad y la sostenibilidad del turismo.
- Desbloquear el potencial del turismo facilitando la inversión para los sectores público y privado, incluida la financiación para dar apoyo a la gobernanza y adoptar nuevos modelos de negocio en lo que se refiere a
digitalización y crecimiento verde. Apoyar la creación de un modelo de financiación innovador como el Fondo de las Naciones Unidas para la Neutralidad Climática del Turismo con el fin de maximizar la contribución delsector a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).