AFP.- La pandemia obligó a celebrar en línea este año varias ferias mundiales de videojuegos, pero la Tokyo Game Show (TGS), que se inauguró el jueves cerca de la capital japonesa, eligió una presentación híbrida.
Además de mantener y desarrollar el formato virtual creado en 2020, con videos transmitidos a lo largo de los cuatro días de la feria, esta vez organizó una parte presencial, reservada a los medios de comunicación y a los “influencers”.
La superficie dedicada a la feria organizada en Chiba, mucho más restringida que antes de la pandemia, permite así tener una impresión más precisa de los juegos presentados, según Take, un influencer que vino a realizar videos para los 180.000 suscriptores de su canal de Youtube.
“Ver imágenes y tener la última información está bien, pero la esencia de los videojuegos es probarlos con el mando en la mano, así que aunque esta vez solo esté abierto a influencers, me parece genial que podamos tener un espacio para probarlos”, explica a la AFP.
Para el público en general, la feria -fundada hace 25 años- también enriqueció la experiencia ofrecida en línea, permitiendo recorrer un espacio en 3D gracias a un casco de realidad virtual o un simple navegador.
Visitando virtualmente los stands de los editores de juegos, el público puede dialogar con otros participantes mediante chat de voz y texto, a través de avatares, y salir en busca de objetos que le permitan desbloquear contenidos adicionales.
También se han programado “visitas virtuales guiadas”, gracias a un guía físicamente presente en el salón que relata sus impresiones en video a medida que camina y prueba los juegos.
El TGS ofrece también la posibilidad de probar los juegos en casa gracias a versiones descargables, que pueden usarse gratuitamente en la computadora o en los teléfonos inteligentes.