AFP.- El gobierno de izquierda español presentó este martes un proyecto de ley de reforma del sistema de pensiones, que prevé aumentar los montos ajustados a la inflación, penalizar las jubilaciones anticipadas e incitar a trabajar más años.
La reforma de las pensiones es una de las condiciones impuestas por la Comisión Europea para que España continúe beneficiándose de los fondos del megaplán de relanzamiento tras el impacto del covid.
“Estas medidas fundamentalmente vienen a garantizar el poder adquisitivo de los pensionistas, que quedó en suspenso (…) con la reforma de las pensiones en 2013”, elaborado en plena cura de austeridad por el precedente gobierno conservador, declaró en rueda de prensa la portavoz del gobierno, Isabel Rodríguez.
En 2018, frente a las importantes y repetidas protestas de los pensionistas, el gobierno conservador de Mariano Rajoy se avino a aumentar temporalmente las jubilaciones indexándolas sobre la inflación, tras haberlo prohibido en 2013.
El proyecto de ley del gobierno del socialista Pedro Sánchez prevé aumentar las pensiones cada 1 de enero “de acuerdo con la inflación media anual registrada en el ejercicio anterior”, precisó un comunicado del gobierno.
Si un año bajan los precios, el monto de las pensiones no variará.
Numerosos economistas estiman que la indexación sobre la inflación no es sostenible para las finanzas públicas españolas, en un contexto en que el déficit de la Seguridad Social fue de unos 30.000 millones de euros (35.150 millones de dólares)en 2020.
Con la reforma, el gobierno del socialista Pedro Sánchez busca también motivar a los asalariados para postergar su jubilación.
La reforma de 2013 del gobierno conservador preveía ya un aumento progresivo de la edad mínima para jubilarse. Actualmente está en 65 años, y ese mínimo debe alcanzar los 67 en el año 2027.
El proyecto de ley prevé varios incentivos para las personas aplacen su retiro, entre ellos un cheque de hasta 12.000 euros (14.100 dólares) por año suplementario trabajado.
Por el contrario, el monto de la pensión se verá reducido en caso de jubilación anticipada.
El gobierno espera que el proyecto sea aprobado por el Parlamento antes de finales de año.
Los próximos meses se consagrarán a las negociaciones sociales sobre el aspecto más sensible del sistema de pensiones, el del “factor de sostenibilidad”, es decir, el coeficiente que permite ajustar el monto de las pensiones al aumento de la esperanza de vida.
Para garantizar la viabilidad del sistema, hará falta bajar las pensiones, según varios analistas.
La demografía española hace que el problema de las pensiones sea particularmente acuciante, ya que la tasa de natalidad del país es la segunda más baja de Europa (1,23 hijos por mujer) y la longevidad es superior a los 83 años, una de las más altas del mundo.