El clérigo ultraconservador Ebrahim Raisí, jefe del Poder Judicial, logró una victoria en las elecciones presidenciales en Irán, según los resultados preliminares, y fue ya felicitado por sus rivales.
El jefe de la comisión electoral del país y viceministro del Interior, Yamal Orf, informó de que Raisí obtuvo 17.800.000 votos de un total de 28.600.000 papeletas escrutadas hasta ahora, es decir, el 62 % de los votos.
Estos 28,6 millones de votos, aunque no es el total definitivo, indican una participación inferior a rondas anteriores, ya que estaban convocados a las urnas más de 59 millones de iraníes.
Los otros tres candidatos eran Mohsen Raisí, que obtuvo 3,3 millones de votos; 2,4, Abdolnaser Hematí; y un millón Amirhosein Qazizadeh Hashemí. Se entiende que el resto de sufragios han sido en blanco o inválidos.
El único candidato moderado que concurría en los comicios, el ex gobernador del Banco Central Hematí, reconoció al clérigo ultraconservador como vencedor en un mensaje en su cuenta de Instagram.
Hematí expresó su esperanza de que el próximo Gobierno, que tomará posesión en agosto, “mejore la situación de la población y genere orgullo para la República Islámica”.
También los conservadores Rezaí, secretario del Consejo de Discernimiento, y el diputado Qazizadeh Hashemí felicitaron a Raisí por su victoria y le desearon éxito.
“Las elecciones demostraron una vez más que la nación iraní no duda en salvaguardar y fortalecer el sistema islámico”, dijo Rezaí en su mensaje.Una pancarta de las elecciones presidenciales se ve en la plaza Valiasr en Teherán
En las presidenciales celebradas ayer estaba clara la victoria de Raisí debido a la debilidad de sus contrincantes, y lo que generaba más incertidumbre era la participación, muy importante para legitimar el sistema teocrático iraní.
El actual mandatario, el moderado Hasan Rohaní, felicitó asimismo al presidente electo, aunque sin nombrarlo debido a que por ley se debe esperar al anuncio oficial de los resultados.
“Está claro quién ha sido elegido por la gente (…) Esperamos que en los próximos 45 días haya mejores para el próximo gobierno, tanto en materia de sanciones como de coronavirus”, agregó, aludiendo a algunos de los problemas del país que Rohaní está intentando solventar en el fin de su mandato.