Mujeres, jóvenes y no hospitalizados son quienes más sufren falta de olfato y gusto por covid-19

Mujeres, jóvenes y no hospitalizados son quienes más sufren falta de olfato y gusto por covid-19

Un mayor afectación de los dos sentidos se corresponde con una menor necesidad del paciente de ser ingresado en un hospital.

Las alteraciones del gusto y del olfato son dos de los síntomas que experimentan algunas de las personas contagiadas por coronavirus. Ahora, un estudio ha detallado que afectan más a mujeres, a pacientes jóvenes y a aquellos que cursan la enfermedad de manera más leve, sin necesidad de ser hospitalizados.

La investigación, llevada a cabo por la Sociedad Española de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello (SEORL-CCC), se ha desarrollado en 15 centros hospitalarios españoles con la participación de 989 pacientes, y ha sido publicada en la revista médica ‘Journal Investigation Allergology and Clinical Immunology’.

“Las investigaciones realizadas nos permiten señalar la alteración del olfato como un síntoma característico de la Covid-19, debido a que el virus se sitúa en el epitelio respiratorio, por lo que puede afectar al neuroepitelio olfatorio”, indicó a Europa Press la doctora Adriana Izquiero-Domínguez, quien ha liderado el estudio.

Más pérdida de olfato, menor gravedad de la enfermedad

El estudio concluye que cuanto más graves son los síntomas relacionados con la distorsión o la pérdida de olfato y gusto, más leve es la enfermedad de covid-19 y menor es la necesidad de hospitalización.

“Hemos encontrado que una mayor gravedad de la Covid-19, con una edad de más de 60 años, hospitalización y mayores niveles de proteína C reactiva, se asocian a menor afectación del olfato que en los pacientes con Covid-19 ambulatorios y más jóvenes”, ha relatado Izquierdo.

Además, se ha determinado que además de ser predominantemente jóvenes quienes sufren estos síntomas, también son mayoritariamente mujeres. Alrededor de la mitad de los pacientes recuperan olfato y gusto unas dos semanas después del diagnóstico, aunque se alerta de que cuanto más grave es la afectación de los dos sentidos, más lenta es su recuperación.

Las alteraciones van desapareciendo de forma espontánea, aunque en un pequeño porcentaje permanecen, alterando la calidad de vida de los pacientes.

Desde las sociedades médicas se aconseja que quienes noten alteraciones de gusto y olfato inicien las medidas de aislamiento y se realicen las pruebas diagnósticas.

Fuente: RT