Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, ofreció este jueves declaraciones en vivo por la Televisión Nacional, para ampliar sobre los hechos sucedidos esta madrugada en Washington D.C., cuando se produjo un acto terrorista contra la sede diplomática de la nación antillana ante EE.UU.
Como se ha divulgado, “un individuo desconocido disparó con un fusil de asalto contra el edificio de la embajada cubana en Washington; no hubo heridos en el personal de la misión, el cual se encuentra seguro y protegido, pero sí daños materiales como resultado de los impactos de numerosos disparos”, refirió el Canciller.
Rodríguez Parrilla afirmó que el gobierno de Cuba espera por la correspondiente investigación de las autoridades estadounidenses sobre la identidad y motivaciones del autor de la agresión, y que dicha investigación se exhaustiva y rápida y sus resultados sean compartidos con La Habana.
“La misión diplomática de Cuba cuenta con un sistema de protección y seguridad para enfrentar cualquier amenaza contra su personal y familiares”, aseveró el representante de la diplomacia cubana, en tanto informó que al mediodía de esta jornada convocó a Mara Tekach, encargada de Negocios de EE.UU. en La Habana, para abordar “este gravísimo hecho”.
El titular de Relaciones Exteriores expresó a la funcionaria “la más enérgica protesta por la agresión terrorista perpetrada” y la interrogó sobre cómo reaccionaría el Gobierno de EE.UU ante un ataque como este a cualquiera de sus embajadas”.
“Insistí en que es una obligación de todos los Estados adoptar las medidas adecuadas para proteger los locales de una misión diplomática acreditada en su territorio contra toda intrusión o daño, evitar que se turbe la tranquilidad o se atente contra su dignidad o funcionamiento, como dispone la Convención sobre Relaciones Diplomáticas de 1961”, dijo.
También Rodríguez Parrilla aseguró que en su comunicación, enfatizó en la gravedad del hecho, que pudo haber puesto en peligro la vida y seguridad del personal de la embajada y sus familiares.
“Reclamé la mayor cooperación de las autoridades del Gobierno de los EE.UU. en el esclarecimiento urgente de los hechos y en las garantías de que actos como este no se repitan o queden impunes”, manifestó en Canciller.
De acuerdo con sus declaraciones, el diplomático llamó la atención, de manera respetuosa, en que una agresión como esta contra la embajada de Cuba en Estados Unidos, en cualquier caso, “ha sido alentada por la creciente retórica hostil contra nuestro país” y donde han estado involucrados, de forma pública y sistemática, tanto el Secretario de Estado de EE.UU. como altos funcionarios de ese departamento, e incluso, la propia embajada estadounidense en La Habana.
“No es posible disociar un hecho como este del recrudecimiento de la política de agresión y hostilidad que aplica el Gobierno de los EE.UU. contra Cuba, ni del endurecimiento del bloqueo, que incluye medidas no convencionales, incluso durante la pandemia de la COVID-19”, planteó Rodríguez Parrilla.
Según la información ofrecida por el titular de Relaciones Exteriores de la isla, en el momento del ataque se encontraban en la misión diplomática una decena de funcionarios y diplomáticos, quienes “corrieron grave peligro”.
Añadió que el país aprecia la conducta profesional de los oficiales de las agencias de aplicación y cumplimiento de la ley, quienes acudieron rápidamente al lugar del hecho.
“El individuo, de cuya identidad el Gobierno cubano no ha sido informado, fue detenido por las autoridades locales en el lugar de los hechos, y se encuentra bajo custodia”, declaró.
Rodríguez Parrilla recordó a la encargada de Negocios de EE.UU. en La Habana, que los actos de instigación a la violencia contra el personal médico cubano en terceros países, como Bolivia, incluso con participación de funcionarios estadounidenses, la calumnias y la demonización de los profesionales de la salud, alientan acciones violentas.
De igual manera, le rememoró a Tekach que “existen graves antecedentes históricos de actos violentos y hostiles, incluidos actos terroristas, contra funcionarios diplomáticos de Cuba radicados en EE.UU., tanto en la sede en Washington, como en su representación permanente ante la ONU, en Nueva York”.
“Tampoco es posible disociar este tipo de hechos del efecto de políticas y discursos de odio que promueven la división y la violencia social”, enfatizó el Canciller cubano, quien además se refirió a que en territorio estadounidense operan y han operado con impunidad, durante años, grupos e individuos que en el pasado cometieron actos terroristas contra la nación caribeña, “lo que es de pleno conocimiento de las agencias de aplicación y cumplimiento de la ley del Gobierno de EE.UU.”
Rodríguez Parrilla insistió en que expresó sorpresa porque “han transcurrido más de 12 horas del ataque, y ni las autoridades oficiales gubernamentales, ni del Departamento de Estado, se han puesto en contacto con las nuestras; y no se han producido declaraciones oficiales, ni siquiera tuits -tan frecuentes contra Cuba- de parte de funcionarios estadounidense ni de su Embajada”.
El diplomático instó también al Departamento de Estado a adoptar, con la mayor urgencia, las medidas necesarias para cumplir de forma íntegra las responsabilidades atribuidas por la Convención de Viena, y garantizar la plena seguridad de la embajada de Cuba y de la misión permanente ante la ONU en Nueva York, así como del personal de ambas y sus familiares.
Antes de concluir sus declaraciones, el Ministro de Relaciones Exteriores aseveró que ha sido ofrecida la cooperación de las autoridades cubanas para el desarrollo de la investigación correspondiente.
Fuente: Cubadebate