El impeachment que enfrenta Donald Trump llega a su fase decisiva en los próximos días.
El presidente de Estados Unidos enfrenta un proceso de juicio que inicia este martes en el Senado (dominado por los republicanos), luego de que la Cámara de Representantes (de mayoría demócrata) votó a favor del procedimiento el mes pasado.
Los miembros de la Cámara alta decidirán si Trump debe ser destituido su cargo. Pero ya que el Partido Republicano tiene una mayoría de senadores suficiente para respaldar al presidente, es probable que sea absuelto.
Demócratas de la Cámara de Representantes se presentarán como los fiscales y tratarán de convencer a todos los senadores, como jurados, de que el presidente debería dejar la Casa Blanca por los cargos de abuso de poder y obstrucción al Congreso.
¿Quiénes son los personajes clave en esta, la tercera vez que se lleva a cabo un juicio político contra un mandatario de EE.UU.?
Fase preliminar
Mitch McConnell y Chuck Schumer
Este no es el primer juicio político para algunos de los actores clave en esta trama política, como Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana del Senado.ANUNCIO
El político participó en la acusación y juicio llevado a cabo contra el presidente Bill Clinton en 1999.
En aquel entonces McConnell era el presidente del Comité de Reglas del Senado y miembro de la “Coalición Conservadora”, un grupo bipartidista de senadores que representaba a los estados sureños.
El republicano ha estado estableciendo las reglas del juicio con el líder de la minoría, el demócrata Chuck Schumer aunque como líder mayoritario, McConnell tendrá la última palabra.
El senador republicano ya advirtió que habría una “coordinación total” con la Casa Blanca en el proceso, lo cual le atrajo críticas ya que se espera que los senadores actúen como jurados imparciales en el proceso.
En los últimos días, McConnell estuvo negociando con los líderes demócratas sobre si se permitirá o no la presentación de testigos y documentos en el juicio.
El juez
John Roberts, presidente de la Corte Suprema de EE.UU.
John Roberts es el presidente de la Corte Suprema de menos edad en más de 200 años: asumió el cargo en 2005 a los 50 años.
Roberts presidirá el juicio político, asegurándose de que todas las partes cumplan con las reglas. A principios de enero les tomó el juramento a los senadores para que se erijan como jurado.
El magistrado ideológicamente es conservador, aunque ha trabajado con jueces liberales en la Corte Suprema antes y ha declarado en repetidas ocasiones su creencia de que la institución debe ser apolítica.
Roberts reprendió a Trump hace dos años cuando el presidente criticó a un juez que no respaldaba sus políticas de inmigración, dándole el sobrenombre de “juez de Obama”.
“No tenemos jueces de Obama o jueces de Trump, jueces de Bush o jueces de Clinton”, dijo Robert en ese momento.
“Lo que tenemos es un grupo extraordinario de jueces dedicados a hacer su mejor esfuerzo para brindarles los mismos derechos a quienes aparecen ante ellos”, añadió.
Los fiscales
Adam Schiff y Jerry Nadler, líderes demócratas del impeachment
Adam Schiff es el líder de un grupo de siete demócratas que manejarán el impeachment por la Cámara de Representantes: Jerry Nadler, Jason Crow, Val Demings, Hakeem Jeffries, Zoe Lofgren y Sylvia Garcia.
Estos congresistas expondrán el caso contra el presidente.
Schiff representa el distrito 28 del Congreso de California y es presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes.
Como tal, se ha convertido en la cara de los procedimientos del juicio político y en una figura odiada por Trump y sus partidarios. El presidente ha lanzado ataques contra el hombre de 59 años.
Schiff dijo que se sentía “honrado” por su nombramiento como el fiscal en jefe. Sus admiradores lo ven como un hombre con un amplio conocimiento del caso y el más adecuado para presentarlo al Senado.
Otra figura clave en el proceso es Nadler, el jefe del Comité Judicial.
El neoyorquino, de 72 años, es congresista desde 1992 y tiene una reputación de apasionado defensor de las libertades civiles, con un historial muy liberal en sus votaciones.
Los defensores
Pat Cipollone, Jay Sekulow, Ken Starr, Alan Dershowitz, abogados
Como abogado de la Casa Blanca, Pat Cipollone liderará la defensa de Trump, al lado del abogado personal del presidente, Jay Sekulow.
Hasta ahora, su papel más importante en los procedimientos de juicio político fueron las cartas que envió a Nadler en las que declaró que la Casa Blanca no participaría en la investigación, además de que calificó el proceso como una “farsa”.
Trump nombró a Cipollone como abogado de la Casa Blanca en diciembre de 2018.
Sekulow, el abogado personal de Trump, dirige el Centro Estadounidense de Derecho y Justicia, una organización conservadora. Se sabe que tiene lazos profundos con la comunidad evangélica.
Por su parte, Ken Starr es conocido por su trabajo como asesor independiente en el caso Whitewater, una investigación sobre inversiones inmobiliarias de Bill y Hillary Clinton.
Esto se amplió en una investigación sobre el caso del presidente Clinton con la becaria de la Casa Blanca, Monica Lewinsky. El Informe Starr, publicado en 1998, condujo al impeachment de Clinton.
Y Alan Dershowitz, profesor retirado de la Universidad de Harvard, es un experto en derecho constitucional de Estados Unidos.
Ha participado en varios casos resonantes. Defendió a OJ Simpson durante el juicio por asesinato contra la estrella del fútbol americano, y ha representado a celebridades como Mike Tyson y Patty Hearst.
En declaraciones a CBS News, el abogado dijo que estaba “muy, muy preocupado” por el precedente que esta acusación podría establecer, y dijo que acordó servir a Trump “como un erudito constitucional independiente”.
“No tomo posición sobre la política, solo sobre la Constitución”, afirmó.
Otros miembros del equipo incluyen Pam Bondi, ex fiscal general de Florida, y los abogados Eric Hershmann y Jane Raskin.
El jurado
Todos los senadores son jurados
Los miembros de la Cámara alta en teoría son imparciales durante el juicio político. Pero la expectativa es que este será un voto muy partidista.
Se requiere una mayoría de dos terceras partes para destituir a Trump del poder. Dado que los republicanos tienen 53 escaños de 100, es probable que el presidente sea absuelto.
Sin embargo, unos pocos republicanos no respaldan completamente a Trump.
La senadora republicana Lisa Murkowski dijo que estaba “perturbada” por la postura de su partido a raíz de los comentarios de McConnell sobre la “cooperación total” con la Casa Blanca, dada la necesidad de imparcialidad durante el juicio.
La prensa de EE.UU. ha sugerido que el excandidato presidencial Mitt Romney, así como Ben Sasse y Susan Collins, son senadores republicanos a seguir durante el juicio continúa para ver cómo reaccionan ante la evidencia.
Pero también existe la posibilidad que dos senadores demócratas, Doug Jones y Joe Manchin, tomen la postura de los republicanos y voten en contra del impeachment bajo la presión de sus electores.
Si bien es probable que el sentido del jurado ya esté decidido, esos son los personajes a observar.
Fuente: BBCMundo