El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, explicó este viernes las distintas posibilidades previstas por su gobierno para la venta del lujoso avión presidencial, estimado por la Organización de Naciones Unidas (ONU) en 130 millones de dólares.
López Obrador afirmó que a su gobierno le está costando deshacerse del Boeing 787-8 Dreamliner —nombrado José María Morelos y Pavón— porque “no hay quien lo compre”.
“Es un palacio para los cielos, es una ofensa para el pueblo de México”, aseveró recordando que el dinero que se obtenga de su venta, será invertido en la compra de equipos médicos para hospitales públicos.
El Jefe de Estado señaló que la primera opción es una persona que ofrece 125 millones de dólares por la aeronave, sin embargo, esta no puede venderse por un monto inferior al avalúo de la ONU.
La segunda posibilidad es un canje con Estados Unidos por un equivalente en equipos médicos para el sistema de salud pública.
“Se entrega el avión a cambio de que nos den el equivalente de dinero en equipos médicos: ambulancias, tomógrafos, equipos de rayos X, todo lo que necesitamos en hospitales; sería lo mínimo 130 millones de dólares para hospitales públicos”, señaló el presidente López Obrador.
En cuanto a la tercera opción, el mandatario dijo que estaba en una cooperativa de una decena de empresas nacionales que pagarían, cada una, un monto de 11 millones de dólares, mientras que la cuarta manera de obtener el dinero es con el alquiler del avión presidencial por horas.
Asimismo, López Obrador destacó una quinta manera que consiste en rifar la aeronave mediante la venta de boletos para el sorteo por un valor de alrededor de 26 dólares, para lo cual se imprimirían seis millones de números, conocidos por “cachitos”.
El avión presidencial fue adquirido en el gobierno del presidente Felipe Calderón (2006-2012) por un valor de 218,7 millones de dólares.
(Con información de Telesur y RT)