La Guardia Revolucionaria de Irán ha confirmado la autoría de un ataque con al menos una decena de misiles contra la base aérea de Al Asad en Irak, que alberga fuerzas estadounidenses.
De momento no se han reportado detalles sobre los daños materiales ni de víctimas producto del ataque.
Venganza iraní
El ataque fue confirmado por Teherán afirmando que fue una venganza por el crímen contra el mayor general iraní Qassem Soleimani, asesinado en un ataque aéreo de EE.UU. en Bagdad (Irak) la semana pasada.
“Esta mañana, valientes combatientes de la Fuerza Aérea del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica lanzaron la exitosa Operación Mártir Soleimani, con el código ‘Oh Zahra’ al disparar decenas de misiles tierra-tierra sobre la base de las fuerzas terroristas e invasoras de EE.UU.”, señaló la Guardia Revolucionaria iraní en un comunicado citado por el medio estatal de noticias, ISNA.
Además, la organización armada aseveró que los aliados de Estados Unidos en la región serán atacados si se emprende alguna acción agresiva desde su territorio, advirtiendo particularmente a Kuwait, Baréin, Arabia Saudita, Jordania e Israel.
Múltiples ataques
Por su parte, Washington señaló que es probable que “múltiples sitios” hayan sido atacados por misiles balísticos y de crucero iraníes, incluida la base aérea Al Asad, sin embargo no está claro de qué otros sitios podría tratarse.
Funcionarios estadounidenses confirmaron a ABC News que se han disparado misiles balísticos desde el interior de Irán contra múltiples instalaciones militares estadounidenses dentro de Irak.
Reacción de Washington
El Pentágono señaló en un comunicado que Teherán lanzó un ataque con una docena de misiles balísticos contra las fuerzas estadounidenses ubicadas en la provincia de Anbar y en la ciudad de Erbil, en Irak y se están evaluando los daños.
“Irán lanzó una ataque con una docena de misiles balísticos contra las Fuerzas Militares de EE.UU. y de la coalición en Irak. Está claro que esos misiles fueron lanzados desde Irán e impactaron contra al menos dos bases iraquíes que albergan militares estadounidenses”, afirmó en un comunicado el asistente del secretario de Defensa para Asuntos Públicos, Jonathan Hoffman.
“Mientras evaluamos el situación y nuestra respuesta, tomaremos las medidas necesarias para proteger y defender al personal estadounidense, a nuestros socios y aliados en la región”, reza el texto.
Al respecto, la Casa Blanca señaló que está al tanto de los ataques y que el presidente Trump ha sido informado de la situación mientras se monitorea la situación.
Las tensiones entre Irán y EE.UU. han aumentado significativamente tras el asesinato del general Qasem Soleimani. Un día después, el presidente iraní, Hasán Rohaní, declaró que “Irán y otros países que buscan la libertad en la región se vengarán”.
Por su parte, Trump anunció que EE.UU. ha marcado como objetivo 52 sitios iraníes “algunos de muy alto nivel y muy importantes para Irán y la cultura iraní”, y prometió que “serán golpeados muy rápido y muy duro” si intereses o ciudadanos estadounidenses son atacados por Teherán.
Fuente: RT