La Organización de Estados Americanos (OEA) “se consolida como instrumento de presión política de EE.UU. y de las oligarquías que defienden el neoliberalismo”. Así lo ha denunciado este domingo el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, en el marco de la clausura del Encuentro Antimperialista de Solidaridad, por la Democracia y contra el Neoliberalismo en La Habana.
La “desmoralizada” OEA es una cosa “muy fea” y “muy cínica”, ya que “sus ‘preocupaciones’ no llegan a las profundidades del enojo de los pueblos que se levantan contra el neoliberalismo y reciben balines, gases y plomo por protestar pacíficamente”, ha asegurado Díaz-Canel.
“El retorno del hegemonismo estadounidense”
El mandatario cubano enfatizó que en la reciente XVIII Cumbre del Movimiento de Países No Alineados en Azerbaiyán, varios líderes se mostraron alarmados ante “el retorno del hegemonismo estadounidense, que amenaza y actúa brutalmente contra los Gobiernos que considera enemigos, porque no comparten sus políticas, y ataca ferozmente al socialismo como si se tratara de un sistema social inaceptable”.
En este sentido, ha advertido que América Latina y el Caribe se enfrentan al regreso “de la Doctrina Monroe y las peores prácticas del macartismo”, en las que se basa la “secuencia descontrolada de acciones injerencistas que la actual Administración estadounidense ha desatado desde su llegada al poder”.
Mientras tanto, dentro de EE.UU., “el discurso es agresivo y descalificador para todos los que no comparten el comportamiento del presidente”, que anuncia por Twitter “decisiones que afectan a millones”, al tiempo que “exhibe comportamientos condenables en cualquier parte”, aseguró el jefe de Estado cubano.
En su discurso, Díaz-Canel reiteró la felicitación a Evo Morales por su triunfo electoral en Bolivia y celebró la victoria de Alberto Fernández en Argentina. Por otro lado, expresó su solidaridad con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y con el mandatario de Nicaragua, Daniel Ortega, al tiempo que exigió la liberación inmediata de Lula da Silva en Brasil.
Fuente: RT Actualidad