Raymundo Jenson, conocido en redes como @reyworldth, enseña música con un enfoque poco convencional pero muy efectivo: utiliza el Dembow como recurso pedagógico.
Desde el aula del Liceo Leonor Isabel Cabrera Reyes, en La Romana, este joven profesor conecta con sus alumnos a través del ritmo urbano. En lugar de imponer fórmulas tradicionales, decidió apoyarse en lo que los jóvenes ya conocían: la música urbana, en especial el Dembow.
“Todo es música, y la música es combinar sonidos con el tiempo”, explica con entusiasmo. Así justifica su propuesta didáctica.
Durante las clases de solfeo, los estudiantes participan con energía. Siguen los ejercicios, responden con precisión y mantienen la atención. Usar patrones rítmicos conocidos ha hecho que incluso los más distraídos comprendan mejor las bases del lenguaje musical.
Raymundo equilibra lo académico con lo creativo. Su objetivo no es solo enseñar teoría, sino también despertar pasión por el arte.
Esta forma de enseñar no solo transmite conocimientos, también rompe con prejuicios sobre géneros musicales que muchos subestiman.
“Lo importante no es el género, sino el enfoque. Si entendemos eso, podemos enseñar con cualquier ritmo”, afirma el profesor.
Además, invita a sus colegas maestros a no temer al cambio. “El mundo evoluciona, y la educación también debe hacerlo”, expresó Jenson.
Al final, lo que queda claro es que enseñar con empatía, creatividad y ritmo puede marcar la diferencia en cualquier aula.