La eterna pregunta sobre si es mejor hacer el amor en la mañana o en la noche a veces llega como un rafagazo a nuestras mentes. Y aunque la preferencia personal y la rutina diaria influyen, estudios apuntan a que las primeras horas del día ofrecen ventajas fisiológicas y emocionales que no se deben pasar por alto.
La mañana: el momento dorado
Estudios coinciden en señalar que la mejor hora para tener relaciones sexuales es en la mañana, específicamente entre las 5:48 y las 7:30.
Un estudio publicado por la Asociación Médica Británica en el British Medical Journal determinó que las 5:48 de la mañana es el momento óptimo, ya que coincide con el pico de testosterona tanto en hombres como en mujeres, lo que incrementa el deseo sexual y la energía física. Otro sondeo realizado en Reino Unido refuerza esta idea, situando las 7:30 como la hora ideal para la intimidad.
Las razones biológicas son claras: al despertar, los niveles de testosterona y estrógeno están en su punto más alto, lo que favorece el funcionamiento sexual y la respuesta al placer. Además, la mente está más despejada y relajada, sin el estrés acumulado del día, lo que permite disfrutar más del encuentro íntimo.
Beneficios del sexo matutino
- Mayor espontaneidad y relajación.
- Liberación de oxitocina, la hormona del vínculo y el bienestar.
- Reducción del estrés y mejor ánimo para el resto del día.
- Mejora de la circulación y del sistema inmunológico.
- Favorece la pérdida de peso y protege la salud ósea.
¿Y el sexo nocturno?
A pesar de los beneficios de la mañana, muchas parejas prefieren la noche por cuestiones de rutina y privacidad. Un estudio de 2017 mostró que la franja de 22:30 a 23:30 es la preferida por muchas parejas.
Sin embargo, los expertos advierten que el cansancio y la disminución de las hormonas sexuales pueden afectar el deseo y el rendimiento sexual en la noche. Para algunas mujeres, la libido alcanza su punto máximo por la noche debido al pico de cortisol, mientras que los hombres suelen estar más predispuestos por la mañana.
