Yuri Tolochko ha vuelto a estar en boca de todos tras haber declarado sentirse enamorado de un cenicero.
Yuri Tolochko acaparó los titulares en noviembre del año pasado cuando presuntamente se casó con su muñeca sexual. Hoy, el hombre de Kazajastán ha vuelto a estar en boca de todos tras haber declarado sentirse enamorado de un cenicero.
Tolochko, quien dijo que durante una sesión de fotos se percató de que sentía algo por el cenicero, ahora pretende colocarle una vagina artificial al objeto.
Del cenicero dice que le gustaron varias cosas. “Me gustó su olor, el toque del metal en mi piel, es fantástico, me gusta el toque del metal afilado en mi piel, me emociona, así que creo que puedes entender lo que me atrae de este cenicero”.
Tolochko, según ha dicho, ha estado saliendo con su cenicero durante un par de meses.
“Generalmente me gustan las cosas con historia”, dijo. “Me encanta que este no es un cenicero nuevo, ha tenido contacto con una gran cantidad de personas”.
“Cuando lo abracé [y] saqué las colillas, paquetes de cigarrillos y todo tipo de cosas, me gustó”, sostuvo. “Me gustó cuando las cenizas me mancharon los pies descalzos, el cuerpo y la barba”.