SANTO DOMINGO.– En medio del dolor por la pérdida de su esposo, el exlanzador de Grandes Ligas Octavio Dotel, Massiel Javier de Dotel se dirigió a familiares, amigos y miembros de la congregación Cielos Abiertos para expresar su agradecimiento por el apoyo recibido y su fe en que la tragedia ocurrida en la discoteca Jet Set tendrá un propósito mayor en la vida de muchas personas.
“Antes de empezar a hablar, tengo que decir que estoy muy agradecida de Dios por muchas cosas”, dijo Massiel al iniciar su mensaje. Aseguró que, aunque para muchos parezca incomprensible, da gracias por haber estado en ese momento de su vida acompañada por su comunidad de fe. Destacó especialmente el respaldo recibido por la pastora Laura Cardenas y el pastor Marcos Yaroide, quienes la acompañaron desde el primer instante tras conocer la noticia del fallecimiento de Octavio.
Massiel explicó que fue ella quien pidió realizar un homenaje a la vida de su esposo y que encontró una respuesta inmediata y solidaria en la iglesia. “Si estamos aquí haciendo este homenaje es porque el Señor lo puso en mi corazón”, afirmó. Comparó el sacrificio de Octavio con el de Cristo, no como una equivalencia directa, sino como una forma de entender el sufrimiento dentro del plan de Dios.
La viuda también compartió varios testimonios ocurridos tras la tragedia, donde personas allegadas decidieron entregarse a la fe. “Una persona llegó a darme el pésame y me dijo: ‘yo me quiero arrepentir’. Luego llegó otra e hizo lo mismo. Después, un amigo me escribió desde Nueva York para contarme que había recibido a Cristo y se inscribió para bautizarse”, relató emocionada.
Con voz serena, Massiel concluyó que el legado de Octavio va mucho más allá del deporte. “Me siento feliz de que el legado de mi esposo ahora impactará vidas y ganará almas para Cristo. Si ese es el precio, yo lo acepto”, dijo con firmeza, dejando claro que, en medio del dolor, encuentra consuelo en la fe y en el propósito que cree que Dios está cumpliendo a través de esta tragedia.