Personal del Negociado de Investigaciones Federales (FBI) evitó un tiroteo que un hombre planeaba ejecutar en Atlanta, Georgia, durante un concierto de Bad Bunny para presuntamente incitar una guerra racial previo a la elección general del 5 de noviembre.
Mark Adams Prieto, de 58 años, fue acusado por un gran jurado federal este martes de cargos de tráfico de armas de fuego, transferencia de un arma de fuego para usarla en un crimen de odio y posesión de un arma de fuego no registrada, informaron las autoridades federales.
El supuesto interés de Adams Prieto, originario de Prescott, Arizona, era protagonizar un tiroteo masivo contra miembros de minorías, y, en particular, afroamericanos.
Las acusaciones presentadas esta semana son resultado de una pesquisa que el FBI inició en octubre pasado a raíz de una denuncia a la oficina de esa agencia en Phoenix.
Un portavoz del Departamento de Justicia dijo a NBC News que, al momento, Adams Prieto se encuentra bajo custodia de agentes del Servicio de Alguaciles federales que lo transportarán de Nuevo México a Arizona.
Adams Prieto reveló sus planes a agentes encubiertos del FBI
La acusación alega que, entre enero de 2024 y mayo, Adams Prieto tuvo discusiones con dos individuos que trabajan con el FBI para idear un plan para cometer un tiroteo masivo contra afroamericanos y otras minorías, y de esa forma, incitar a una guerra racial antes de la elección presidencial en EE.UU. El hombre desconocía que los otros dos individuos trabajan para el Gobierno.
El acusado pensaba que compartían sus mismas creencias y que lo ayudarían a concretar su plan, indica un comunicado de la Oficina del Fiscal Federal para el Distrito de Arizona divulgado esta semana.
El evento era uno de los conciertos que el trapero puertorriqueño realizaría el 14 y 15 de mayo en Atlanta. En efecto, Bad Bunny presentó esos días su espectáculo en el “State Farm Arena” de la referida ciudad como parte de su gira “Most Wanted Tour”.