A pesar de la lejanía con la que fue realizada la boda de José Llano y Jesús Abreu, en “el patio”, la noticia creo gran euforia y, aunque ya pasaron varios días de dicha unión, aun en redes sociales se continúa hablando de este evento, con opiniones a favor y en contra.
José y Jesús, decidieron unir sus vidas luego de 19 años de relación, lo hicieron en medio de la naturaleza, en España, la madre patria. Ambos son ciudadanos españoles y estuvieron acompañados por sus hijos y amigos cercanos.
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Con el lema, “Donde hay amor, hay familia”, un mercadologo y un cirujano se dieron el sí.
Según Tania Báez, madrina de los recién casados, José y Jesús son dos amigos de esos que todos sueñan con tener.
Definió a Llano como un ser humano presente, solidario, sensible, preocupado por los demás, de esos “hermanos” que lloran y ríen contigo. Mientras que a Abreu lo calificó como un roble en el que sus seres cercanos pueden sostenerse en los momentos difíciles. “Siempre aparece, es apasionado, frontal, generoso, desprendido. Es ese hermano mayor, con el que no sientes miedo, porque sabes que el está ahí para resolver”.
En su escrito, expresó que el amor entre estos dos seres humanos fue atrevido y valiente porque desafiaron barreras sociales, culturales en una sociedad tercer mundista con muchas creencias que condicionan el amor y la empatía.
“Ellos dieron el frente. Y su amor doblegó la incomprensión de muchos, Su amor venció la resistencia de otros”, dijo.
Según Tania, José y Jesús, son una muestra de que el amor todo lo transforma.
