La empresaria Amara La Negra mostró su mansión en Miami, una propiedad que compró en menos de un millón de dólares y ahora vale tres millones.
“La casa estaba en malas condiciones y nadie la quería, pero como soy una mujer con mucha visión, le di potencial”, dijo la artista. “Aprendí el valor de las antigüedades”.
Tanto, que en su casa hay candiles de bronce y cristales de murano que valen más de 60 mil dólares. “Quiero comprar una gasolinera o un edificio”, confesó la exconcursante de Mira quien baila, quien en su oficina tiene enmarcada la portada de los 50 más bellos, en donde posó con Demi Lovato y J Balvin. “Soy muy ambiciosa y cuando pasé por esta casa abandonada, yo tenía dinero, guardé 350 mil dólares y lo puse de depósito”.
La mansión ya arreglada al estilo rococó mide siete mil pies cuadrados y hasta tiene un bar y una sala de cine en donde disfruta las peleas de boxeo. “Mi dinero es limpio, eso sí lo puedo decir yo” aclara Amara, quien recientemente confesó que había sido abusada en el show Secretos de las indomables (Canela TV). “Simpre he dicho que no es tu culpa nacer pobre, pero morir pobre es tu culpa”.
Para mantener una propiedad tan grande, Amara recurre a chicas salvadoreñas y ecuatorianas que le ayudan a ella y su madre. “A mí no me da tiempo”, dijo. “No me da tiempo de hacer oficios yo soy el hombre y mujer de esta casa”.
De hecho, la dominicana tiene diversos contratos con cadenas de comida que le ayudan a sacar adelante a sus hijas. “Trabajo mucho”, dijo la madre quien ya no tiene nada que ver con el padre de sus hijas. “Yo hago negocios, [pero] el verme sin la protección masculina, me hizo mucha falta, [la verdad], no soy muy buena escogiendo [pareja]”.
Amara, su madre y Sumajestad y Sualteza, no están solas, la cantante también hospeda a un amigo diseñador quien le crea todos los vestuarios para diversos eventos y vive en una pequeña casita dentro de la mansión. “Yo compro todo lo que haga falta”, dice la experta en bienes raíces en República Dominicana. “Yo misma no me vendo porque no puedo”.
En la mansión de dos niveles, la protagonista de Love and Hip hop Miami tiene un cuarto solamente para sus pelucas. “No pretendo morir pobre”, y finalizó. “Yo no chapeo, no me gusta que me regalen”.
People en español