También conocido como Día Internacional de las Bromas o April Fool’s Day en Estados Unidos, esta festividad es muy popular.
La teoría más fuerte sobre la razón de este festejo tiene que ver con el Rey Carlos IX de Francia y con el calendario gregoriano. Hasta el 1582 la fiesta de Año Nuevo se celebraba del 25 de marzo hasta el 1 de abril, pero aquel año el monarca decidió abrazar el calendario gregoriano, que trasladaba dicha festividad al 1 de enero, tal y como la conocemos hoy en día.
Sin embargo, hubo gente que durante muchos años no se percató del cambio e incluso había personas que se negaban a esta modificación y seguían celebrando el Año Nuevo con la entrada de la primavera. Los que sí que estaban enterados de ello, con el paso del tiempo, decidieron burlarse de sus compatriotas más despistados invitándoles a fiestas falsas y riéndose de ellos constantemente. También se popularizó colgar un trozo de papel con forma de pescado en la espalda de las ‘víctimas’.
Este día se empezó a conocer como Poisson d’avril y se fue popularizando tanto que en el siglo XVIII la tradición dio el salto a Gran Bretaña y Escocia, que a su vez la exportaron a las colonias americanas.
Este día se trata de gastar bromas a las personas de forma de que caigan como inocentones o crédulos. Actualmente la manera más común de realizar estas jugarretas es difundiendo noticias falsas en Internet, sobre todo en las redes sociales, para que las personas la compartan o den su opinión, tal cual como si fuese cierto.
Es un día tradicionalmente dedicado a las bromas en los países anglosajones. No obstante, esta costumbre que hace unos años solo se celebraba en países como Gran Bretaña, Estados Unidos o Australia, se ha extendido y popularizado por casi todo el mundo. Así pues, no sería de extrañar que hoy te llevarás una buena broma si conoces a alguien de Alemania, Portugal, Italia, Holanda, Japón, Brasil o Francia.