Redacción AFP.- Con unos radiantes Penélope Cruz y Javier Bardem optando a un nuevo galardón, Cate Blanchett como invitada especial y un ambiente de emocionado reencuentro, el cine español se viste este sábado de gala para entregar unos Premios Goya que recuperan al público tras la austera edición del año pasado.
Primero Bardem -con traje, camisa y pajarita negra-, y más tarde Cruz con un elegante vestido claro de Channel, la pareja de flamantes candidatos al Óscar estuvieron entre los más aclamados de la alfombra roja del Palau de les Arts de Valencia (este). Igualmente esperada fue la llegada de Blanchett, con un favorecedor traje de flecos, quien recibirá el primer Goya Internacional.
Con el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, entre el público, pasadas las 22H00 (21H00 GMT) arrancó la gala a la que “El buen patrón” llega como gran favorita gracias a su récord de 20 candidaturas.
La sátira sobre el capitalismo de Fernando León de Aranoa, que sumerge al espectador en el tóxico ambiente de Básculas Blanco, una empresa de provincias dirigida por un jefe sin escrúpulos, tiene a ocho de sus intérpretes compitiendo en diferentes categorías, encabezados por un soberbio Bardem, a quien muchos dan como ganador asegurado.
“Vamos a ver qué pasa. No sería ni la primera ni la última vez que un favorito no se lleva un reconocimiento”, afirmó sonriente el actor, quien sin embargo optará al Óscar por su trabajo en “Being the Ricardos”.
– Nada decidido –
También llega a Valencia con sólidos argumentos, y 14 candidaturas, “Maixabel”, de Icíar Bollaín, gracias a su relato de la historia real del encuentro de Maixabel Lasa, viuda del político vasco Juan María Jáuregui, con dos miembros de la banda armada separatista ETA arrepentidos de haber participado en el asesinato de su marido.
Por detrás, con ocho candidaturas, quedó la reflexión sobre la maternidad y la memoria histórica de Pedro Almodóvar, “Madres paralelas”. La película del director manchego tuvo más suerte en los Óscar, donde además del trabajo de Cruz fue reconocido el autor de su música, Alberto Iglesias, quien sin embargo competirá por su decimosegundo Goya por su trabajo en “Maixabel”.
La categoría de mejor película la cierran “Libertad” (6), de la novel Clara Roquet, y “Mediterráneo” (7), de Marcel Barrena.
– Sin abrazos –
Con los indicadores pandémicos a la baja, España encara con precaución el que podría ser el ansiado regreso a la normalidad. Con ese optimismo –aún cauto– se ha diseñado esta gala donde actuarán Joaquín Sabina o C. Tangana y que contrastará con la austeridad de la anterior, cuando Antonio Banderas fue el sobrio conductor de una ceremonia insólita desde un teatro vacío en Málaga (sur), y con el país todavía atenazado por la pandemia.
Sin presentador fijo –y con algunas precauciones como un aforo reducido y la recomendación de limitar el contacto físico– los organizadores prometen más novedades en esta gala de la que, por ahora, solo se conocen dos premiados: el primer Goya Internacional, para Blanchett, y el de Honor para el veterano actor José Sacristán.
Los 28 “cabezones” restantes son una incógnita. Pese al aplaudido trabajo de Bardem, que con cinco goyas es el actor con más galardones, sus competidores son los potentes Luis Tosar (“Maixabel”), Javier Gutiérrez (“La hija”) y Eduard Fernández (“Mediterráneo”).
– Competencia latinoamericana –
Más fácil podría tenerlo Fernando León para lograr su tercer Goya a la mejor dirección y sacudirse así la decepción del martes, cuando “El buen patrón” quedó a las puertas de entrar en el quinteto finalista que competirá por el Óscar a mejor película internacional.
Para lograrlo, los académicos tendrán que preferir el trabajo de este minucioso realizador por encima de los de Bollaín, Manuel Martín Cuenca (“La hija”) y Almodóvar, quien esta vez no parte como favorito para conquistar su cuarto galardón como director.
Sí que parece más cerca su protagonista y actriz fetiche, Penélope Cruz, a quien su atormentada y firme Janis no deja de darle alegrías.
Primero fue la Copa Volpi en Venecia, luego su candidatura en España y ahora su cuarta nominación al Óscar, que ya consiguió como secundaria por “Vicky, Cristina, Barcelona” (2009).
La actriz madrileña contará también con una dura competencia, especialmente la de la sólida “Maixabel” de Blanca Portillo, además de Emma Suárez (“Josefina”) y la veterana Petra Martínez (“La vida era esto”).
Por el galardón a mejor película iberoamericana competirán la peruana “Canción sin nombre”, la chilena “La cordillera de los sueños”, la argentina “Las siamesas” y la mexicana “Los lobos”.