El inolvidable cantautor Victor José Victor Rojas (Víctor Víctor), será inmortalizado con el rótulo “Víctor Victor Way” que será colocado en la esquina de la avenida Fort Washington y calle 178, en el Alto Manhattan, donde él residió por varios años.
Nació en Santiago de los Caballeros el 11 de diciembre de 1948 y murió el 16 de julio 2020 en Santo Domingo. La ceremonia es convocada por el concejal del distrito 10 Ydanis Rodríguez, el rótulo se develizará el jueves 27 de mayo a las 11:00 de la mañana.
Como en cada uno de los homenajes similares que se han hecho a artistas, deportistas, médicos, activistas comunitarios y otras figuras de incidencia de la comunidad dominicana radicada en Nueva York, la iniciativa es del concejal Rodríguez quien sometió el proyecto en el Concejo Municipal.
El concejal dijo que Víctor Víctor sigue siendo un artista querido e influyente para cientos de miles de dominicanos en la ciudad de Nueva York.
“Sus composiciones de temática social dieron forma a las esperanzas, sueños y luchas cotidianas de los dominicanos como inmigrantes económicos y políticos en los Estados Unidos. Para conmemorar su vida y legado, la intersección de la calle 178 y la avenida Fort Washington, donde el cantautor residió durante años, será co nombrada como Víctor Víctor Way”, explicó Rodríguez.
El cantautor nació en Santiago de los Caballeros, el 11 de diciembre de 1948. Inició su vida artística como compositor, en 1968, cuando escribió los temas: “Como tú, una flor”, bautizada por el público como “La confusión” y “El camino de los amantes”, mejor conocida como “La casita”.
A partir del éxito de estas canciones, grabadas en 1972 por Felipe Pirela y Fernando Casado, el nobel autor decide lanzarse como intérprete y compositor, labor que le llevó a formar parte importante de la antología de la canción romántica dominicana, trascendiendo asimismo a Las Américas y Europa a través de otros intérpretes a quienes entregó numerosos temas.
En la década del setenta, su inconformidad con la política y los rumbos económicos por los que se movía la República Dominicana en los gobiernos del fallecido doctor Joaquín Balaguer y su Partido Reformista, y la agitación internacional le llevaron a asumir la canción social como su brújula estética.
En 1973 fundó y dirigió el grupo Nueva Fortuna, con el que recorrió todo el país con su participación en el festival 7 Días con el Pueblo. En 1978 creó el grupo Flamboyán, y es a través de este que proyecta su música como una muestra de mestizajes rítmicos. Durante cinco años compartió los escenarios con las figuras más celebres de la canción latinoamericana y se presentó en Puerto Rico, Venezuela, Cuba, Estados Unidos e Italia.
Fue un estudioso de las raíces del merengue y la bachata, a su vez recreando el género y enriqueciéndolo. Éxitos como “Mesita de noche”, “Ando buscando un amor” y “Así es mi amor” están hechos con sencillez y bellas metáforas, siendo interpretados por los más importantes vocalistas dominicanos y extranjeros.
En 1990 lanzó su disco titulado “Inspiraciones” que contiene el tema “Mesita de Noche”, el cual se convirtió en todo un éxito internacional. En él se amalgaman los ritmos caribeños en un estilo nuevo. Para 1996 la relevancia de “Vitico”, como cariñosamente le llamaban, es tal que le merece el puesto de presidente del Consejo Presidencial de Cultura, logrando con su trabajo la ley que crea para el país la Secretaría de Estado de Cultura, actualmente Ministerio de Cultura.
Produjo 17 producciones, dos centenares de canciones y obtuvo numerosos reconocimientos y premios en su país y en el exterior y participó en importantes festivales y eventos en varios países.
Fue galardonado con los premios Lo Nuestro, Aplauso 92, Ronda, ACE, Aplauso 98, ASCAP y ONDA.
Entre los intérpretes que han hecho de sus composiciones grandes éxitos están Ángela Carrasco, Celia Cruz, Guadalupe Pineda, Maridalia Hernández, Milly Quezada, La Sophy, Charytín, Azúcar Moreno, Marc Anthony, Emmanuel, Dyango y Danny Rivera.
En su producción Bachata Entre Amigos de 2006 interpretó a dúo y en bachata, éxitos clásicos de cantautores como Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Silvio Rodríguez y Fito Páez, entre otros. Muchos de esos autores interpretaron por primera vez sus canciones en ese ritmo.
Fue un embajador de la bachata, presentándola como la forma musical más reciente de los dominicanos, exitosamente sirviendo de activista para conseguir que fuera reconocida por la UNESCO como “Patrimonio Inmaterial de la Humanidad”. Ha ilustrado su amor por el ritmo a través de sus producciones, sus conciertos, y sus conferencias magistrales, las cuales impartió tanto en su país como en Colombia, Chile, Venezuela, España y Estados Unidos, entre otros.
Sus últimos 5 años los dedicó a desarrollar el proyecto Vecindarios Creativos, creando más de 40 puntos culturales con programas de educación de música popular y danza para niños y jóvenes. Este proyecto le producía gran satisfacción y continuará de la mano de todos aquellos allegados que él hizo parte del mismo, como tributo a su vida y su obra.